El Canal se prepara para la sequía Medio ambiente. La empresa que gestiona el agua, el Canal de Isabel II, pone en marcha una comisión especial que impondrá un plan de restricciones si no llueve en los próximos meses
Mar, 03/05/2005
El Canal de Isabel II se prepara para la sequía que viene castigando a la región, y al resto de España, en los últimos años. La empresa que gestiona el agua en la Comunidad de Madrid tiene previsto en las próximas semanas convocar la comisión de la sequía, un organismo que reunirá a los técnicos del Canal de Isabel II para hacer frente a la falta de lluvias para llenar los embalses madrileños.
Actualmente el nivel de los pantanos de la región está al 62%, mientras que el año pasado por las mismas fechas era de cerca del 80%. En el año 1992 también se produjo una fuerte sequía y el Canal de Isabel II puso en marcha un protocolo, que ya ha comenzado a funcionar hace algunos semanas en la región, con un único objetivo: ahorrar.
Para elaborar este protocolo se han realizado estudios técnicos y análisis estadísticos sobre las posibilidades de lluvia. Fuentes del Canal indicaron que ya se han comenzado a aplicar algunas medidas. Desde hace algo más de un mes se bombea del caudal del río Alberche hasta el embalse de Valmayor. Se remonta un volumen de cinco metros cúbicos de agua por segundo, a través de un desnivel de 300 metros para lo cual hay que gastar electricidad.
La segunda medida se puso en marcha a comienzos del mes pasado cuando empezaron a abrirse campos de pozos. El objetivo es sacar el agua de los acuíferos, esos ríos y balsas que se encuentran en el subsuelo, hasta una profundidad máxima de 700 metros.
La comisión de la sequía, encabezada por el gerente Ildefonso de Miguel, estudiará las medidas técnicas para hacer frente a un posible incremento de la sequía por falta de lluvias. Además de las decisiones internas del Canal de Isabel II, se lanzará una campaña con anuncios en medios de comunicación y folletos a los consumidores de concienciación de la población madrileña para que los ciudadanos ahorren un bien escaso como es el agua.Se calcula que estas medidas podrán ahorrar entre un 5 y un 10% del consumo.
El Gobierno central puso en marcha recientemente un organismo similar para elaborar una serie de planes necesarios para ahorrar el máximo posible. En esta comisión están representadas las confederaciones de ríos de todo el país, así como el Ministerio de Medio Ambiente.
Si la sequía se mantiene, y no llueve el próximo otoño, se pondrá en marcha la alerta en la región y comenzarán las restricciones, que en un primer nivel afectarán al riego de los jardines y zonas verdes. En ese primer nivel no se prevén cortes de agua para la población, aunque sí una vigilancia especial sobre los pozos para que no se riegue con estas aguas, como ya sucedió hace años.
En la región existe un grave problema pues mientras la población ha duplicado el consumo en pocos años, no se han construido nuevos embalses para almacenar el agua en las fases de lluvias.
El gerente de la empresa, Ildefonso de Miguel, ha mantenido varias reuniones con los responsables del Ministerio de Medio Ambiente para informarles de la necesidad de la región de buscar nuevas alternativas. Los intentos de construir nuevos embalses fuera de la región han fracasado y el Ministerio de Medio Ambiente tampoco está ahora por la construcción de nuevos pantanos, que siempre provocan conflictividad
Actualmente el nivel de los pantanos de la región está al 62%, mientras que el año pasado por las mismas fechas era de cerca del 80%. En el año 1992 también se produjo una fuerte sequía y el Canal de Isabel II puso en marcha un protocolo, que ya ha comenzado a funcionar hace algunos semanas en la región, con un único objetivo: ahorrar.
Para elaborar este protocolo se han realizado estudios técnicos y análisis estadísticos sobre las posibilidades de lluvia. Fuentes del Canal indicaron que ya se han comenzado a aplicar algunas medidas. Desde hace algo más de un mes se bombea del caudal del río Alberche hasta el embalse de Valmayor. Se remonta un volumen de cinco metros cúbicos de agua por segundo, a través de un desnivel de 300 metros para lo cual hay que gastar electricidad.
La segunda medida se puso en marcha a comienzos del mes pasado cuando empezaron a abrirse campos de pozos. El objetivo es sacar el agua de los acuíferos, esos ríos y balsas que se encuentran en el subsuelo, hasta una profundidad máxima de 700 metros.
La comisión de la sequía, encabezada por el gerente Ildefonso de Miguel, estudiará las medidas técnicas para hacer frente a un posible incremento de la sequía por falta de lluvias. Además de las decisiones internas del Canal de Isabel II, se lanzará una campaña con anuncios en medios de comunicación y folletos a los consumidores de concienciación de la población madrileña para que los ciudadanos ahorren un bien escaso como es el agua.Se calcula que estas medidas podrán ahorrar entre un 5 y un 10% del consumo.
El Gobierno central puso en marcha recientemente un organismo similar para elaborar una serie de planes necesarios para ahorrar el máximo posible. En esta comisión están representadas las confederaciones de ríos de todo el país, así como el Ministerio de Medio Ambiente.
Si la sequía se mantiene, y no llueve el próximo otoño, se pondrá en marcha la alerta en la región y comenzarán las restricciones, que en un primer nivel afectarán al riego de los jardines y zonas verdes. En ese primer nivel no se prevén cortes de agua para la población, aunque sí una vigilancia especial sobre los pozos para que no se riegue con estas aguas, como ya sucedió hace años.
En la región existe un grave problema pues mientras la población ha duplicado el consumo en pocos años, no se han construido nuevos embalses para almacenar el agua en las fases de lluvias.
El gerente de la empresa, Ildefonso de Miguel, ha mantenido varias reuniones con los responsables del Ministerio de Medio Ambiente para informarles de la necesidad de la región de buscar nuevas alternativas. Los intentos de construir nuevos embalses fuera de la región han fracasado y el Ministerio de Medio Ambiente tampoco está ahora por la construcción de nuevos pantanos, que siempre provocan conflictividad