España vive la sequía más dura de los últimos 60 años
Dom, 01/05/2005
En su informe, el Instituto de Meteorología califica la situación de extrema. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, precisó que el abastecimiento de agua está garantizado.
Entre los meses de noviembre y marzo, las precipitaciones en España han sido escasas, tanto como para que el Instituto de Meteorología señale que estamos ante el año más seco desde 1947.
El Instituto Nacional de Meteorología (INM) ha advertido de la escasez de precipitaciones durante el otoño y el invierno y ha calificado la situación de los últimos siete meses de extrema sequía. Según este organismo, el periodo de cinco meses comprendido entre noviembre y marzo se puede considerar el más seco al menos desde 1947, año en que se comenzó a recopilar el volumen de precipitaciones obtenida de los datos de la red pluviométrica del Instituto. Pese a los alarmantes datos, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, insistió ayer en el que el abastecimiento urbano de agua está garantizado a pesar de la ausencia de lluvias.
Según el organismo meteorológico, el año hidrológico (que comienza el 1 de septiembre) se sigue caracterizando una vez entrada la primavera por el acusado déficit de precipitaciones en la mayor parte del país. Esa escasez se ha incrementado de forma considerable a lo largo del invierno. Los datos apuntan que a fecha 31 de marzo el volumen total de agua acumulado en las cuencas peninsulares en los últimos siete meses supone un 37 por ciento menos que el valor medio habitual para esas fechas y que todos los meses han sido secos o muy secos.
Enero, el mes seco. De este periodo de escasas precipitaciones, destaca el mes de enero, durante el cual sólo llovió en conjunto el 16 por ciento del valor medio, mientras que el mes de diciembre ese porcentaje fue del 62 por ciento y se considera el mes menos seco. En noviembre, el porcentaje que representaron las precipitaciones medias registradas sobre los valores normales fue del 44 por ciento, mientras que tanto en febrero como en marzo este porcentaje se sitúa entre el 55 y el 60 por ciento. Si se considera el período estrictamente invernal, la precipitación media en la península es de poco más de 70 milímetros de agua, frente a los 200 milímetros de valor normal
La fuerte ola de frío ha sido también causante de esta situación y el motivo de que en muchas regiones las lluvias apenas alcanzaran el 50 por ciento del valor medio. El informe del INM señala que los suelos están de secos a muy secos en Extremadura, el oeste de Andalucía, Castilla-La Mancha, Aragón, el sur de Cataluña y Murcia, y se mantienen muy húmedos o ligeramente húmedos en Galicia y en la franja cántabro-pirenaica.
Narbona reconoció que la situación es muy severa, aunque observó que la la disponibilidad de recursos en muy diferente en las distintas cuencas y destacó que el Ministerio lleva varios meses planteándose medidas específicas para paliar la sequía y también impulsando la ejecución de obras de emergencia en Murcia, en Andalucía, Ceuta y Melilla. EFE. Madrid.
Málaga: 200 litros menos que la media histórica
La provincia de Málaga atraviesa por un año de escasas precipitaciones, lo que ha hecho descender el agua de los embalses por debajo del 50 por ciento de su capacidad. Además, la salinización del sistema del Guadalhorce rebaja aún más el índice de reservas reales. La Junta de Andalucía no quiere todavía utilizar el término `alarma´, pero lo cierto es que está preparando todo un paquete de medidas por si fuera necesario.
De entrada, se han recuperado para su uso los pozos que se excavaron en la zona del Guadiaro durante la sequía del 95 y se adelantará la puesta en funcionamiento de la desaladora de Marbella para el mes de junio.
Las precipitaciones se encuentran muy por debajo de la media habitual. La lluvia media a lo largo de un año es de 547 litros por metro cuadrado en Málaga capital. Desde enero, tan sólo se han recogido 172 litros por metro cuadrado, pero aún quedan ocho meses para su conclusión. El parámetro más utilizado, el de año hidrológico (octubre-septiembre) no arroja tampoco cifras alentadoras, tan sólo 377 litros por metro cuadrado cuando quedan, además, los meses en teoría más secos.
Con todo, repasando el histórico de precipitaciones, algunos años fueron con creces peores que el actual. Por ejemplo, en 1985 sólo se recogieron 266 litros. En segunda posición, se sitúa el año 94, recordado por la sequía, con 298,9 litros. El tercer año más seco fue 1981, con sólo 314 litros registrados por metro cuadrado
Entre los meses de noviembre y marzo, las precipitaciones en España han sido escasas, tanto como para que el Instituto de Meteorología señale que estamos ante el año más seco desde 1947.
El Instituto Nacional de Meteorología (INM) ha advertido de la escasez de precipitaciones durante el otoño y el invierno y ha calificado la situación de los últimos siete meses de extrema sequía. Según este organismo, el periodo de cinco meses comprendido entre noviembre y marzo se puede considerar el más seco al menos desde 1947, año en que se comenzó a recopilar el volumen de precipitaciones obtenida de los datos de la red pluviométrica del Instituto. Pese a los alarmantes datos, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, insistió ayer en el que el abastecimiento urbano de agua está garantizado a pesar de la ausencia de lluvias.
Según el organismo meteorológico, el año hidrológico (que comienza el 1 de septiembre) se sigue caracterizando una vez entrada la primavera por el acusado déficit de precipitaciones en la mayor parte del país. Esa escasez se ha incrementado de forma considerable a lo largo del invierno. Los datos apuntan que a fecha 31 de marzo el volumen total de agua acumulado en las cuencas peninsulares en los últimos siete meses supone un 37 por ciento menos que el valor medio habitual para esas fechas y que todos los meses han sido secos o muy secos.
Enero, el mes seco. De este periodo de escasas precipitaciones, destaca el mes de enero, durante el cual sólo llovió en conjunto el 16 por ciento del valor medio, mientras que el mes de diciembre ese porcentaje fue del 62 por ciento y se considera el mes menos seco. En noviembre, el porcentaje que representaron las precipitaciones medias registradas sobre los valores normales fue del 44 por ciento, mientras que tanto en febrero como en marzo este porcentaje se sitúa entre el 55 y el 60 por ciento. Si se considera el período estrictamente invernal, la precipitación media en la península es de poco más de 70 milímetros de agua, frente a los 200 milímetros de valor normal
La fuerte ola de frío ha sido también causante de esta situación y el motivo de que en muchas regiones las lluvias apenas alcanzaran el 50 por ciento del valor medio. El informe del INM señala que los suelos están de secos a muy secos en Extremadura, el oeste de Andalucía, Castilla-La Mancha, Aragón, el sur de Cataluña y Murcia, y se mantienen muy húmedos o ligeramente húmedos en Galicia y en la franja cántabro-pirenaica.
Narbona reconoció que la situación es muy severa, aunque observó que la la disponibilidad de recursos en muy diferente en las distintas cuencas y destacó que el Ministerio lleva varios meses planteándose medidas específicas para paliar la sequía y también impulsando la ejecución de obras de emergencia en Murcia, en Andalucía, Ceuta y Melilla. EFE. Madrid.
Málaga: 200 litros menos que la media histórica
La provincia de Málaga atraviesa por un año de escasas precipitaciones, lo que ha hecho descender el agua de los embalses por debajo del 50 por ciento de su capacidad. Además, la salinización del sistema del Guadalhorce rebaja aún más el índice de reservas reales. La Junta de Andalucía no quiere todavía utilizar el término `alarma´, pero lo cierto es que está preparando todo un paquete de medidas por si fuera necesario.
De entrada, se han recuperado para su uso los pozos que se excavaron en la zona del Guadiaro durante la sequía del 95 y se adelantará la puesta en funcionamiento de la desaladora de Marbella para el mes de junio.
Las precipitaciones se encuentran muy por debajo de la media habitual. La lluvia media a lo largo de un año es de 547 litros por metro cuadrado en Málaga capital. Desde enero, tan sólo se han recogido 172 litros por metro cuadrado, pero aún quedan ocho meses para su conclusión. El parámetro más utilizado, el de año hidrológico (octubre-septiembre) no arroja tampoco cifras alentadoras, tan sólo 377 litros por metro cuadrado cuando quedan, además, los meses en teoría más secos.
Con todo, repasando el histórico de precipitaciones, algunos años fueron con creces peores que el actual. Por ejemplo, en 1985 sólo se recogieron 266 litros. En segunda posición, se sitúa el año 94, recordado por la sequía, con 298,9 litros. El tercer año más seco fue 1981, con sólo 314 litros registrados por metro cuadrado