Bruselas retiene el pago de la ayuda a Melonares por la falta de informes
Jue, 21/04/2005
La respuesta de la UE a una queja de Ecologistas en Acción señala que el Gobierno aún no ha presentado los documentos que deben certificar el cumplimiento de las condiciones impuestas para aprobar el proyecto
antonio chamorro. Después de las lluvias del pasado mes de octubre que obligaron a realizar una parada técnica en las obras del pantano de Melonares, el proyecto que debe garantizar el suministro a Sevilla y su área de influencia se ha encontrado un nuevo problema, que esta vez afecta a las ayudas económicas aprobadas por la Comisión Europea. Según reveló ayer la organización Ecologistas En Acción, la Dirección General de Política Regional de la Comisión Europea mantiene retenido el segundo de los pagos en los que se ha dividido la subvención concedida por Bruselas para la ejecución del proyecto, que asciende a unos 28 millones de euros aproximadamente.
La Comisión Europea remitió un escrito a la organización ecologista en respuesta a una queja en la que ésta denunciaba el incumplimiento de varias de las condiciones a las que está obligado el Estado español para acceder a esta ayuda. El Gobierno está obligado a presentar un informe a la UE en el que demuestre que está cumpliendo estas condiciones, aunque el escrito procedente de Bruselas asegura que las autoridades españolas no presentaron el mencionado informe en el último comité de seguimiento que tuvo lugar en Madrid en abril de 2004 .
Por ello, los servicios tienen retenido un pago intermedio presentado por la Autoridad pagadora el pasado siete de julio. Precisamente, la ministra de Medio Ambiente acudió el pasado mes de septiembre a Bruselas para desbloquear este segundo pago de las ayudas y reconoció que el proyecto del pantano de Melonares forma parte de aquellos que tenían cierta dificultad con la Comisión Europea (CE) .
No obstante, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) negó el extremo de que se haya paralizado la financiación del pantano y atribuyó la decisión de Bruselas de retener el segundo de los pagos a la ausencia de un informe que debe explicar las razones por las que se incrementó la partida destinada a las expropiaciones , según señalaron fuentes de este organismo. En un comunicado, el presidente de la CHG, Francisco Tapia, aseguró que en ningún caso se debe a ninguna irregularidad o la ocultación de algún tipo de información como denuncia Ecologistas en Acción .
La queja a la que ahora ha contestado la Dirección General de Política Regional fue presentada en marzo de 2003 y denunciaba que el Gobierno español no había cumplido en plazo varias de las cláusulas que imponía la concesión de la ayuda al pantano. Entre ellas, la realización antes de 2001 de un plan sobre medidas de gestión de la demanda global de agua destinado a reducirla o la adopción de un programa de uso público de la presa que garantice de manera definitiva que se evitarán los efectos indeseables de la presencia humana .
La queja incide especialmente en la polémica suscitada sobre el posible uso del canal de riego del Viar como conducción para llevar el agua desde el pantano hasta la capital hispalense, al que se oponen radicalmente los ecologistas. En este sentido, la protesta presentada en Bruselas asegura que el cumplimiento de la condición que obliga a utilizar una canalización específica "ya ha sido descartada por las autoridades españolas con competencia en el proyecto, que han anunciado el aprovechamiento del canal de riego . La respuesta de la Comisión, no obstante, insiste en que todos estos aspectos deben recogerse en el informe que no ha sido presentado y que ha provocado la retención de uno de los pagos de la ayuda.
a. ch.
n La Comunidad de Regantes del Viar ha puesto por escrito las condiciones que exige a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y la Junta de Andalucía para permitir el uso del canal de riego que utilizan en la actualidad y ha remitido un borrador de convenio que considera necesario para alcanzar el consenso que también pide Bruselas para permitir el uso de esta infraestructura.
Los regantes insisten en su planteamiento de que el uso compartido del canal no puede suponer un perjuicio para nuestros intereses , según aclaró el presidente de la entidad, Francisco Lara, y plantean a la Administración que asuma prácticamente todas las inversiones "que asegure los caudales que necesitan los riegos del Viar y compatibilicen ambos usos en toda fecha (riego y abastecimiento) , señala el texto de este borrador de convenio.
El documento, incluso, pide que se les devuelva la tarifa que han venido pagando a la CHG en los últimos 50 años en concepto de amortización por la construcción del canal. En concreto, por un tramo de 17,5 kilómetros: 15 que quedarán inundados por el pantano y otros 2,5 kilómetros que, después de las obras de modernización de los regadíos de la zona, quedarán destinados en exclusiva al abastecimiento. Esta cantidad estaría en torno a 7,3 millones.
El convenio incluye otros cinco puntos, referentes a diversas actuaciones en el canal que resultan imprescindibles para alcanzar el consenso. Los regantes exigen que no se les repercuta los costes de las obras para elevar el agua de Melonares hasta el canal de riego; para aumentar la capacidad del canal en unos dos metros cúbicos por segundo, que garantice las demandas y necesidades de ambos usos ; para elevar el agua del Guadalquivir que utilizan los regantes hasta las nuevas balsas que se construirán dentro de plan de modernización –este agua no puede mezclarse con la del canal en caso de que se utilice para abastecimiento–; y para las obras necesarias como consecuencia del nuevo sistema de explotación compartido de los dos usuarios.
antonio chamorro. Después de las lluvias del pasado mes de octubre que obligaron a realizar una parada técnica en las obras del pantano de Melonares, el proyecto que debe garantizar el suministro a Sevilla y su área de influencia se ha encontrado un nuevo problema, que esta vez afecta a las ayudas económicas aprobadas por la Comisión Europea. Según reveló ayer la organización Ecologistas En Acción, la Dirección General de Política Regional de la Comisión Europea mantiene retenido el segundo de los pagos en los que se ha dividido la subvención concedida por Bruselas para la ejecución del proyecto, que asciende a unos 28 millones de euros aproximadamente.
La Comisión Europea remitió un escrito a la organización ecologista en respuesta a una queja en la que ésta denunciaba el incumplimiento de varias de las condiciones a las que está obligado el Estado español para acceder a esta ayuda. El Gobierno está obligado a presentar un informe a la UE en el que demuestre que está cumpliendo estas condiciones, aunque el escrito procedente de Bruselas asegura que las autoridades españolas no presentaron el mencionado informe en el último comité de seguimiento que tuvo lugar en Madrid en abril de 2004 .
Por ello, los servicios tienen retenido un pago intermedio presentado por la Autoridad pagadora el pasado siete de julio. Precisamente, la ministra de Medio Ambiente acudió el pasado mes de septiembre a Bruselas para desbloquear este segundo pago de las ayudas y reconoció que el proyecto del pantano de Melonares forma parte de aquellos que tenían cierta dificultad con la Comisión Europea (CE) .
No obstante, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) negó el extremo de que se haya paralizado la financiación del pantano y atribuyó la decisión de Bruselas de retener el segundo de los pagos a la ausencia de un informe que debe explicar las razones por las que se incrementó la partida destinada a las expropiaciones , según señalaron fuentes de este organismo. En un comunicado, el presidente de la CHG, Francisco Tapia, aseguró que en ningún caso se debe a ninguna irregularidad o la ocultación de algún tipo de información como denuncia Ecologistas en Acción .
La queja a la que ahora ha contestado la Dirección General de Política Regional fue presentada en marzo de 2003 y denunciaba que el Gobierno español no había cumplido en plazo varias de las cláusulas que imponía la concesión de la ayuda al pantano. Entre ellas, la realización antes de 2001 de un plan sobre medidas de gestión de la demanda global de agua destinado a reducirla o la adopción de un programa de uso público de la presa que garantice de manera definitiva que se evitarán los efectos indeseables de la presencia humana .
La queja incide especialmente en la polémica suscitada sobre el posible uso del canal de riego del Viar como conducción para llevar el agua desde el pantano hasta la capital hispalense, al que se oponen radicalmente los ecologistas. En este sentido, la protesta presentada en Bruselas asegura que el cumplimiento de la condición que obliga a utilizar una canalización específica "ya ha sido descartada por las autoridades españolas con competencia en el proyecto, que han anunciado el aprovechamiento del canal de riego . La respuesta de la Comisión, no obstante, insiste en que todos estos aspectos deben recogerse en el informe que no ha sido presentado y que ha provocado la retención de uno de los pagos de la ayuda.
a. ch.
n La Comunidad de Regantes del Viar ha puesto por escrito las condiciones que exige a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y la Junta de Andalucía para permitir el uso del canal de riego que utilizan en la actualidad y ha remitido un borrador de convenio que considera necesario para alcanzar el consenso que también pide Bruselas para permitir el uso de esta infraestructura.
Los regantes insisten en su planteamiento de que el uso compartido del canal no puede suponer un perjuicio para nuestros intereses , según aclaró el presidente de la entidad, Francisco Lara, y plantean a la Administración que asuma prácticamente todas las inversiones "que asegure los caudales que necesitan los riegos del Viar y compatibilicen ambos usos en toda fecha (riego y abastecimiento) , señala el texto de este borrador de convenio.
El documento, incluso, pide que se les devuelva la tarifa que han venido pagando a la CHG en los últimos 50 años en concepto de amortización por la construcción del canal. En concreto, por un tramo de 17,5 kilómetros: 15 que quedarán inundados por el pantano y otros 2,5 kilómetros que, después de las obras de modernización de los regadíos de la zona, quedarán destinados en exclusiva al abastecimiento. Esta cantidad estaría en torno a 7,3 millones.
El convenio incluye otros cinco puntos, referentes a diversas actuaciones en el canal que resultan imprescindibles para alcanzar el consenso. Los regantes exigen que no se les repercuta los costes de las obras para elevar el agua de Melonares hasta el canal de riego; para aumentar la capacidad del canal en unos dos metros cúbicos por segundo, que garantice las demandas y necesidades de ambos usos ; para elevar el agua del Guadalquivir que utilizan los regantes hasta las nuevas balsas que se construirán dentro de plan de modernización –este agua no puede mezclarse con la del canal en caso de que se utilice para abastecimiento–; y para las obras necesarias como consecuencia del nuevo sistema de explotación compartido de los dos usuarios.