Las Tablas de Daimiel (Ciudad Real) contará con un nuevo Centro de Visitante

Sáb, 19/03/2005

Europa Press

El Parque Nacional 'Las Tablas' de Daimiel (Ciudad Real) contará con un nuevo Centro de Visitante en el que se verá la influencia que ha tenido el hombre en el Parque.
Así lo confirmó su director, Manuel Carrasco, quién, además manifestó que "se trata de recordar y no olvidar la historia de Las Tablas, y sobre todo ver cómo, de qué manera, la intervención humana ha afectado al humedal, al tiempo que se rellena una laguna que existía en este ecosistema manchego".
Según recordó en nota de prensa el Ayuntamiento de la localidad ciudadrealeña, actualmente, el Parque cuenta con Centro de Visitantes que trata de aspectos relacionados con la biótica, fauna y flora; aspectos geológicos e informa de la problemática del Acuífero, pero no se aborda un capítulo "muy importante" en la historia de Las Tablas de Daimiel, que es la intervención humana.
Por ello, en una primera fase las obras de acondicionamiento convertirán el Molino de Molemocho en un Centro de Visitantes, donde se reflejará toda la trayectoria del hombre en humedal manchego. En la segunda, se remodelará el entorno del camino de Molemocho y está previsto que concluya para la primavera del 2006.
Igualmente, Carrasco señaló que, cuando comiencen las obras de remodelación se organizarán visitas guiadas para los alumnos de distintos centros educativos de Daimiel, Villarrubia de los Ojos y Torralba de Calatrava, entre otras localidades cercanas al Parque.
INCENDIOS.
Por otro lado, en relación con los dos incendios que ha sufrido el Parque en los últimos días, el director de las Tablas señaló que "las investigaciones continúan", si bien adelantó que el Parque está extremando las medidas de vigilancia, algo que, por cierto, y según Carrasco, hizo posible que las consecuencias del segundo de los incendios "fuesen mínimas, gracias a que la guardería del Parque reaccionó de forma inmediata".
Respecto a los niveles hídricos de Las Tablas, su director reseñó que, en estos momentos, el humedal sobrepasa las 1.000 hectáreas inundadas, pero si continúa la escasez de lluvia durante la primavera puede comprometer "no sólo el inicio de la cría de aves acuáticas sino, sobre todo, que ésta se produzca en buenas condiciones".