La CHJ propone la desalación para frenar la explotación de los pozos

Lun, 03/01/2005

El País

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha dictado una resolución en la que condiciona la concesión a la mercantil Aguas Municipalizadas de Alicante -entidad que gestiona el abastecimiento humano de los municipios de L'Alacantí- de más aportes procedentes de los pozos del sistema subterráneo del Vinalopó a la generación de nuevos caudales, provenientes de la desalación o reutilización de aguas depuradas.
De esta forma, la CHJ admite parcialmente las alegaciones presentadas por el colectivo Ecologistas en Acción del País Valenciano, contrario a aumentar los recursos de los acuíferos del sistema del Vinalopó y partidario de sustituirlos por los caudales que ya produce la desaladora de Agua Amarga, en concreto 18 hectómetros cúbicos al año, cifra que se duplicará con la prevista ampliación de la instalación.
El expediente para renovar la concesión a la mercantil está pendiente de su ratificación por el comisario de Aguas. En su propuesta inicial, la empresa Aguas Municipalizadas de Alicante pretendía incrementar de 32 a 45 hectómetros cúbicos la extracción de los acuíferos del Vinalopó para el abastecimiento de Alicante, Petrer, Monforte del Cid, Villena, Novelda, Cañada, San Vicent del Raspeig y Sant Joan d'Alacant.
El estudio de demandas y recursos brutos subterráneos presentado por Aguas de Alicante a la CHJ recoge que los derechos de aprovechamiento de aguas de los 22 acuíferos del Vinalopó ascienden a 29.511.980 metros cúbicos, más otros 2.500.000 metros cúbicos procedentes de los pozos de San Juan y San Agustín, lo que supone un total de 32.011.980 metros cúbicos. La empresa aspira a aumentar este volumen hasta los 45.090.700 en el año 2010. La mercantil considera que las nuevas captaciones no dañarán los 22 acuíferos que conformarían la unidad única de explotación, ya que su equilibrio sostenible quedaría garantizado con los nuevos recursos procedentes de los trasvases Júcar-Vinalopó y del Ebro, según argumentó antes de la derogación de esta última transferencia.
La propuesta de Aguas de Alicante fue inicialmente informada favorablemente por el Área de Gestión del Dominio Público Hidráulico de la Confederación. La hipotética concesión sería por un plazo de 25 años, con un volumen máximo de 19 hectómetros cúbicos. Este mismo departamento, tras estudiar las alegaciones de Ecologistas en Acción del País Valenciano, ha modificado su primer informe y ha dictado una nueva resolución que rebaja la concesión en un hectómetro cúbico y advierte de que la Confederación podrá sustituir en cualquier momento los aportes de los acuíferos por otros caudales, entre ellos la desalación. Los ecologistas basaron sus alegaciones en la sobreexplotación de los acuíferos donde se ubican los pozos para los que la empresa Aguas Municipalizadas de Alicante solicita la nueva concesión.
El portavoz en Alicante del colectivo ecologista, Carlos Arribas, anuncia que volverán a presentar nuevas alegaciones, antes de que el comisario de Aguas resuelva definitivamente el expediente, porque, a su juicio, la mercantil argumenta la extracción de nuevos caudales de los acuíferos sobre la base de los aportes del trasvase Júcar-Vinalopó y del Ebro, 'y ambos proyectos están en suspenso', precisa el ecologista. El primero suspendido por una sentencia del Tribunal Supremo y el segundo, derogado por el Gobierno central. Los ecologistas también denuncian la 'escasa beligerancia' de la comunidad de regantes del Vinalopó a la pretensión de Aguas de Alicante de aumentar las extracciones, 'ya que ellos son los principales perjudicados de la sobreexplotación de los acuíferos de la comarca', matiza Arribas. Ni los regantes ni la Junta de Usuarios del Vinalopó ha presentado alegaciones a la demanda de Aguas de Alicante.