Un informe cuestiona que la ecotasa vaya a producir un ahorro en el consumo de agua
Dom, 19/12/2004
Todo el regadío de la Comunidad paga muy por debajo del precio de la desalación
J. Sierra, Valencia
El precio que soportan todas las comunidades de regantes de la Comunidad Valenciana sea cual sea su localización geográfica, su disponibilidad de recursos y el origen de los mismos- superficial o subterráneo- está muy por debajo de los costes mínimos atribuidos a la desalación, incluidos los equipos que incorporan los últimos avances tecnológicos, y que se sitúan en la actualidad en unos 0,40 céntimos de euro el metro cúbico bombeado a 100 metros de altura sobre el nivel del mar y a unos 15 kilómetros del centro de producción.
No obstante, el encarecimiento de los costes del agua hasta unos ciertos niveles y en determinados cultivos no parece suponer una dificultad insalvable para la mayor parte de las explotaciones hortofrutícolas mediterráneas con alto valor añadido por unidad de superficie, según se desprende, aunque sin figurar entre las conclusiones principales, de un trabajo del Centro Valenciano de Estudios sobre Riego de la Universidad Politécnica.
Investigadores del Centro estiman, tras analizar en un trabajo pionero el coste real del agua que soportan los regantes valencianos, que implantar un precio público al agua -lo que ahora se denomina ecotasa-podría no producir los efectos buscados como el de la reducción del consumo.
Nuevos estudios
El trabajo, realizado por José Carles Genovés, catedrático de Economía y ex presidente de la confederación Hidrográfica del Júcar, María García Mollá y Carles Sanchís Ibor, concluye afirmando que los nuevos modelos de gestión del agua «requerirán de estudios que ayuden a conocer más profundamente las condiciones en las que actualmente se gestiona el recurso y las repercusiones que tendrá la implantación de estas nuevas prácticas».
Dentro de la incertidumbre que genera cual será la respuesta de los distintos regadíos presentes en la Comunidad Valenciana a la aplicación de una tasa que encarezca el precio del agua, Carles Genovés sostiene en un trabajo anterior y en referencia al coste que representa el agua que «los bienes cuya relevancia en la economía del consumidor o de los procesos productivos suponen una proporción muy baja sobre el valor del consumo total o sobre el coste total de la producción tienen una elasticidad muy próxima a cero y no cabe esperar que las variaciones en los precios tengan relevancia en el consumo».
De hecho, muchos agricultores confiesan que su interés por el riego por goteo no viene tanto de la necesidad de ahorrar agua por una cuestión económica vinculada a este bien sino por que con esa técnica se producen «ahorros más elevados» en otros costes como los que representa la mano de obra, los fitosanitarios,etc., según se señala en los citados informes
J. Sierra, Valencia
El precio que soportan todas las comunidades de regantes de la Comunidad Valenciana sea cual sea su localización geográfica, su disponibilidad de recursos y el origen de los mismos- superficial o subterráneo- está muy por debajo de los costes mínimos atribuidos a la desalación, incluidos los equipos que incorporan los últimos avances tecnológicos, y que se sitúan en la actualidad en unos 0,40 céntimos de euro el metro cúbico bombeado a 100 metros de altura sobre el nivel del mar y a unos 15 kilómetros del centro de producción.
No obstante, el encarecimiento de los costes del agua hasta unos ciertos niveles y en determinados cultivos no parece suponer una dificultad insalvable para la mayor parte de las explotaciones hortofrutícolas mediterráneas con alto valor añadido por unidad de superficie, según se desprende, aunque sin figurar entre las conclusiones principales, de un trabajo del Centro Valenciano de Estudios sobre Riego de la Universidad Politécnica.
Investigadores del Centro estiman, tras analizar en un trabajo pionero el coste real del agua que soportan los regantes valencianos, que implantar un precio público al agua -lo que ahora se denomina ecotasa-podría no producir los efectos buscados como el de la reducción del consumo.
Nuevos estudios
El trabajo, realizado por José Carles Genovés, catedrático de Economía y ex presidente de la confederación Hidrográfica del Júcar, María García Mollá y Carles Sanchís Ibor, concluye afirmando que los nuevos modelos de gestión del agua «requerirán de estudios que ayuden a conocer más profundamente las condiciones en las que actualmente se gestiona el recurso y las repercusiones que tendrá la implantación de estas nuevas prácticas».
Dentro de la incertidumbre que genera cual será la respuesta de los distintos regadíos presentes en la Comunidad Valenciana a la aplicación de una tasa que encarezca el precio del agua, Carles Genovés sostiene en un trabajo anterior y en referencia al coste que representa el agua que «los bienes cuya relevancia en la economía del consumidor o de los procesos productivos suponen una proporción muy baja sobre el valor del consumo total o sobre el coste total de la producción tienen una elasticidad muy próxima a cero y no cabe esperar que las variaciones en los precios tengan relevancia en el consumo».
De hecho, muchos agricultores confiesan que su interés por el riego por goteo no viene tanto de la necesidad de ahorrar agua por una cuestión económica vinculada a este bien sino por que con esa técnica se producen «ahorros más elevados» en otros costes como los que representa la mano de obra, los fitosanitarios,etc., según se señala en los citados informes