Medio Ambiente baraja no hacer la nueva presa y traer agua de otros embalses

Mié, 10/11/2004

Hoy

La CHT ve problemas medioambientales en la construcción del embalse en el río Almonte Abre un periodo de información pública que incluye otras tres alternativas para abastecer a Cáceres PABLO CALVO/CÁCERES El Ministerio de Medio Ambiente baraja no construir un nuevo embalse de abastecimiento para Cáceres, Sierra de Fuentes y Malpartida de Cáceres por los problemas medioambientales que podría causar en el entorno que se había elegido, el río Almonte, a unos tres kilómetros de Monroy.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), José María Macías, informó ayer de que está a punto de salir a información pública en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el proyecto de nuevo abastecimiento para estas tres localidades, pero incluyendo cuatro alternativas, de las que solo una, la que hasta ahora era considerada la opción definitiva, contempla la construcción de nueva presa.

Las otras tres alternativas consisten en traer agua de otros tres embalses ya existentes. Se trata del de Portaje, próximo a Torrejoncillo, que según señaló el presidente de la CHT fue construido hace unos 15 años para alimentar unos regadíos que finalmente no se llevaron a cabo; el de Salor; y el más grande de Alcántara, para que el sería necesario instalar una desaladora que rebajara los niveles de sal que tiene el agua embalsada en este punto.

«En estos momentos no nos inclinamos por ninguna solución. Queremos hacer un proceso muy claro y participativo, que tenga todos los parabienes», aseguró ayer Macías.

No obstante, el presidente de la CHT señaló que el lugar escogido en el Almonte tiene problemas medioambientales y sugirió que podría tener dificultades de financiación por parte de la Unión Europea.

Interés comunitario

«Es un lugar de interés comunitario, es decir, zona que goza de la máxima protección europea y a Bruselas no le gustaría», subrayó Macías, quien también recordó que la nueva presa afectaría a «especies endémicas» que tienen su principal hábitat en este entorno natural.

El presidente de la CHT explicó, asimismo, que cualquiera de las otras tres alternativas tienen una capacidad suficiente para garantizar el abastecimiento de agua de 200.000 habitantes para los próximos 30 ó 40 años.

Señaló, igualmente, que desde un punto de vista técnico, para el abastecimiento de agua a un núcleo urbano, a partir de un cierto nivel, «la capacidad no es importante; lo es más la regularidad de las entradas de agua en el embalse».

En este sentido, subrayó que «la capacidad de agua disponible en el Almonte es irregular».

Macías, quien ayer acompañó a la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, y al presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, José Ignacio Sánchez, en la rueda de prensa convocada para informar sobre las inversiones del Ministerio de Medio Ambiente en Extremadura, precisó que el contemplar otras alternativas a la construcción de una nueva presa en el Almonte, presupuestada en el Plan Hidrológico Nacional con 50 millones de euros, «no es un problema económico».

Una vez que salga publicado en el BOE, el periodo de información pública para la presentación de alegaciones por parte de entidades o particulares se prolongará durante algo más de un mes. En función de las opiniones que se recaben, la CHT se inclinará por una de las cuatro alternativas y realizará la debida evaluación de impacto ambiental. El objetivo es que las obras del nuevo abastecimiento se inicien en el 2006.

Ecologistas

Desde que se conoció la decisión del anterior equipo de la Confederación Hidrográfica del Tajo de construir una nueva empresa en el río Almonte, desechando otras opciones como la del río Tamuja, distintos colectivos conservacionistas se habían manifestado en contra, e incluso se constituyó la denominada 'Plataforma en Defensa del Río Almonte' integrada por 10 grupos.

Desde esta Plataforma se aduce que el río Almonte «en sus aproximadamente 100 kilómetros de longitud conecta una enorme variedad de hábitats bien conservados, en los que sobreviven comunidades botánicas y zoológicas de excepcional valor».

«La característica primordial de este curso fluvial», añadían el pasado mes de julio, «al margen de su riqueza biológica y paisajística, radica en la circunstancia de ser uno de los últimos ríos españoles sin embalsar, lo que le convierte en un referente para el estudio de los ecosistemas fluviales ibéricos».

Miembros de la Plataforma se reunieron en septiembre con el presidente de la CHT