La Universidad debatirá el uso y la gestión del agua en el siglo XXI Garantías y consenso

Mié, 03/11/2004

La Verdad

ALBACETE PRESENTACIÓN. El profesor Tarjuelo, junto al vicerrector del campus, ayer. / A. VICO La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y el Centro Regional de Estudios del Agua (CREA) presentaron ayer, en rueda de prensa, la jornada El desafío de la gestión y planificación del uso del agua en el Siglo XXI, que se celebrará en el Paraninfo universitario del Campus de Albacete los próximos 15 y 16 de noviembre y a la que está invitada la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.

El objetivo, explicó el vicerrector del Campus, Antonio Roncero, es analizar desde una perspectiva «económica, social y política» un tema candente como «el aprovechamiento de los recursos hídricos en nuestro país y, evidentemente en nuestra zona, en nuestra región y en relación con las regiones colindantes».

José María Tarjuelo, director del CREA, agregó que la jornada pretende ser un «foro de debate», donde escuchar opiniones y planteamientos consumidores, ecologistas, usuarios agrícolas, representantes de ayuntamientos y diputaciones y del mundo universitario.

También asistirán los políticos «que toman las decisiones», entre los que se ha invitado a la ya citada titular del Ministerio de Medio Ambiente, además de a varios directores generales responsables de la planificación y gestión de los recursos hídricos, así como a las confederaciones hidrográficas del Segura y del Júcar.

«Desde la Universidad sentimos la necesidad de brindar nuestra casa para convertirla en un foro de encuentro y exposición de ideas para, entre todos, y partiendo de la premisa de que casi nadie puede tener toda la razón, sino que es compartida, se tenga una visión más amplia, a la vez que ayudamos a buscar las soluciones que nos hacen falta», añadió Tarjuelo, quien subrayó la necesidad de mantener la solidaridad entre regiones a la hora de compartir recursos hídricos.

Tajo-Segura

Sobre la petición de poner una fecha de cierre al Trasvase Tajo-Segura, y a preguntas de los periodistas, Tarjuelo manifestó que hasta ahora había percibido varias ideas, desde «que no haya trasvases» a que «es bueno reflexionar después de veinticinco años de funcionamiento de un trasvase, el del Tajo, que es el único en servicio en España, sobre si lo que hasta ahora se ha venido haciendo hay que mantenerlo o es bueno cambiar».

Tarjuelo expresó su convencimiento de que el planteamiento hasta ahora expresado no es el de que «radicalmente se cierran los trasvases», sino «reflexionemos sobre si el tipo de trasvase que existe en este momento es el más adecuado» y esto va unido, dijo, a la reivindicación regional de disponer de «una mayor participación en los órganos de decisión de esa planificación de los recursos».

Algo esto último que, el director del CREA, dijo entender pues, recordó, por Castilla-La Mancha es pasan «siete cuencas hidrográficas», aunque ninguna esté íntegramente en la Región.

Sobre el derogado trasvase del Ebro, idea central del Plan Hidrológico Nacional que aprobó el Gobierno de Aznar y que echó para atrás el de Zapatero, José María Tarjuelo dijo que «a lo mejor tan grande como se planteaba no era posible», pero se declaró convencido de que «algo de agua en el Ebro sobra para poderla utilizar» sin que provoque alarmismo entre los aragoneses. El profesor José María Tarjuelo añadió, sobre el debate del trasvase del Ebro y la polémica social y política que ha generado, que «No se puede negar que una oportunidad puede ser un trasvase, pero es importante que tenga una garantía medioambiental y un consenso entre las regiones cedentes y las que reciben el agua».

Tarjuelo defendió la puesta en marcha de los Centros de Intercambio de Agua como «algo que estaba demandando la sociedad» y que «la ley contempla», aunque ahora «hay que terminar de ver cómo se implementa eso en la realidad de las distintas cuencas», pues el agua «es un bien público sujete a autorizaciones de uso». «Si de verdad soluciona problemas creo que es una buena herramienta».