Los regantes piensan que la desaladora saldrá adelante a pesar de los obstáculos
Mié, 03/11/2004
Ante los rumores generados de las dificultades sobre al puesta en marcha de la desaladora que irá destinada a las necesidades de los regantes, el presidente del Sindicato del Tajo-Segura, Francisco del Amor, aseguró ayer que la sociedad estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed), se ha comprometido a que en la próxima primavera se presentará un avance del coste de la obra y más detalles sobre el plan, que presenta todavía muchos puntos por concretar, entre ellos, el gran problema de la salmuera y, por otro, la concreción de las tarifas del agua, acorde con la petición de los regantes.
Murcia- Según afirmó ayer el presidente del Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura, Francisco del Amor, el proyecto para construir una planta desaladora, en colaboración con la Politécnica de Cartagena «sigue adelante ». El compromiso de la puesta en marcha de la desaladora, en la que se lleva trabajando dos años, cuenta con el beneplácito de Acuamed, explicó del Amor. Así, esta sociedad estatal se ha comprometido para el mes de marzo o abril un avance del coste de la obra y más detalles sobre el plan. Sin embargo, uno de los mayores inconvenientes de la puesta en marcha de esta instalación hidráulica es la falta de concreción de muchos datos técnicos. Uno de ellos, como señaló ayer el presidente de los regantes del Tajo-Segura es la eliminación de la salmuera. Sobre el precio del agua desalada, Francisco del Amor aseguró que los regantes estiman que se podría pagar el precio cúbico a 0,12 o 0,13 céntimos de euro el metro cúbico, muy por debajo de lo previsto por el Ministerio de Medio Ambiente. La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ya estimó hace unas semanas que el precio del agua desalada podría llegar a la cantidad de 33 céntimos de euro el metro cúbico, duplicándose el precio en los casos en los que el agua desalada proceda del mar, hasta alcanzar entre 68 y 80 céntimos de euro el metro cúbico , o lo que es lo mismo, de 113 a 133 pesetas. Así lo explicó el presidente de esta federación, Andrés del Campo, quien aseguró que es necesario considerar, no sólo los costes energéticos derivados del proceso de desalinización, sino también los asociados a la impulsión del agua desalada hasta la zona regable y su transporte. Del Campo advirtió sobre la incertidumbre en los regadíos que genera la falta de concreción sobre las tarifas de los recursos hídricos procedentes de la desalación.
Murcia- Según afirmó ayer el presidente del Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura, Francisco del Amor, el proyecto para construir una planta desaladora, en colaboración con la Politécnica de Cartagena «sigue adelante ». El compromiso de la puesta en marcha de la desaladora, en la que se lleva trabajando dos años, cuenta con el beneplácito de Acuamed, explicó del Amor. Así, esta sociedad estatal se ha comprometido para el mes de marzo o abril un avance del coste de la obra y más detalles sobre el plan. Sin embargo, uno de los mayores inconvenientes de la puesta en marcha de esta instalación hidráulica es la falta de concreción de muchos datos técnicos. Uno de ellos, como señaló ayer el presidente de los regantes del Tajo-Segura es la eliminación de la salmuera. Sobre el precio del agua desalada, Francisco del Amor aseguró que los regantes estiman que se podría pagar el precio cúbico a 0,12 o 0,13 céntimos de euro el metro cúbico, muy por debajo de lo previsto por el Ministerio de Medio Ambiente. La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ya estimó hace unas semanas que el precio del agua desalada podría llegar a la cantidad de 33 céntimos de euro el metro cúbico, duplicándose el precio en los casos en los que el agua desalada proceda del mar, hasta alcanzar entre 68 y 80 céntimos de euro el metro cúbico , o lo que es lo mismo, de 113 a 133 pesetas. Así lo explicó el presidente de esta federación, Andrés del Campo, quien aseguró que es necesario considerar, no sólo los costes energéticos derivados del proceso de desalinización, sino también los asociados a la impulsión del agua desalada hasta la zona regable y su transporte. Del Campo advirtió sobre la incertidumbre en los regadíos que genera la falta de concreción sobre las tarifas de los recursos hídricos procedentes de la desalación.