REGANTES-AGUA Aumento precio agua hará peligrar casi 1,5 millones ha. regadíos

Vie, 17/09/2004

EFE

El aumento del precio del agua de uso agrícola, según el sector, no sólo hará perder competitividad a la agricultura española de regadío, sino que supondrá la desaparición de entre 1 y 1,5 millones de hectáreas de regadío tradicional, sobre todo, del interior de España.
Así lo aseguró hoy, en un almuerzo informal, el presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore), Andrés del Campo, quien expresó la incertidumbre en la que están inmersos los regantes tras la derogación del trasvase el Ebro y el posible retraso en la puesta en marcha del Plan Hidrológico Nacional (PHN).
Reiteró su malestar por que la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, no haya sometido, antes de su aprobación, el Real Decreto Ley por el que se derogaba el trasvase al Pleno del Consejo Nacional del Agua en el que están los representantes de los usuarios de todas las cuencas españolas.
En la actualidad el precio que se paga por el agua en los regadíos españoles es variable, ya que depende del tipo de cultivo, del clima y de los derechos adquiridos, no obstante, una gran parte de los regantes está pagando 0,03 euros por metro cúbico, otros desembolsan 0,12 euros y los menos 0,24 euros en la zona del litoral.
Del Campo precisó que cualquier variación al alza de los precios del agua, sobre todo en los regadíos del interior, que son principalmente de subsistencia y que, por el clima, no pueden cambiar a otro tipo de cultivos, haría insostenible la agricultura de regadío española, la más competitiva.
Los regantes están también preocupados por la importancia que el actual Gobierno da a las desalinizadoras frente a los trasvases que, según Del Campo, "nunca pueden ser una solución" en el abastecimiento del agua para agricultura, sino una fórmula complementaria.
Explicó que la desalinización supone un gran coste energético, del que la agricultura no puede depender, sobre todo, en caso de crisis energéticas, que haría inviable muchas zonas de regadíos españolas, "sin contar con el impacto medioambiental".
Asimismo, criticó que la vida útil de una desaladora es de entre 10 y 15 años, además varias de estas obras están "infrautilizadas y trabajan a un 15 por ciento de su capacidad", mientras que la de un trasvase es de un mínimo de 50 años.
Además, mostró su preocupación su preocupación por la intención del Gobierno de modificar el régimen económico-financiero de la Ley de Aguas que incrementaría la carga fiscal de los usuarios de las aguas, una norma que, a su juicio, se adapta fielmente a la Directiva Marco de Aguas, que no entrará en vigor hasta 2006 y cuya transposición debe realizar el Gobierno español.
FENACORE cuenta con numerosas entidades federadas que suponen 700.000 regantes y casi dos millones de hectáreas -más del 50 por ciento del regadío nacional- y en España existen un total de 7.196 comunidades de regantes y otros tipos de colectivos de riego que gestionan un total de 2,5 millones de hectáreas de superficie regable.
España es el país europeo de la cuenca mediterránea con mayor superficie de tierras de cultivo, con 20,3 millones de hectáreas, de las que el 83 por ciento corresponde a secano y el 17 por ciento restante a regadío, además, el país cuenta con el mayor número de superficie de regadío del Mediterráneo, con 3,3 millones de hectáreas.