L. Yañez/E. Gea, Torrevieja

Agentes especializados del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) y de la Guardería Fluvial de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) comenzaron ayer una investigación «a pie de terreno» para localizar el punto exacto de «conexión y vertido ilegal de aguas contaminadas» arrojadas de manera encubierta a un colector del organismo de cuenca que desemboca finalmente en la Cala Ferris de Torrevieja, y que está produciendo la contaminación de la citada playa y problemas de salud pública a sus usuarios. Al colector sólo se pueden verter aguas procedentes de drenajes de riego y las originadas por las desalabradoras de la zona.

El comisario de aguas de la CHS, Manuel Aldeguer, mantuvo ayer una reunión en Murcia con miembros de la Comunidad de Propietarios de Lo Ferris, donde se expuso el problema por el que atraviesa esta zona desde hace varias semanas. El presidente de los vecinos, Francisco Peñalver, señaló a este medio que el organismo de cuenca «se ha comprometido a inspeccionar los tramos del colector Ñemisario submarinoÑ para poder averiguar de dónde proceden los vertidos contaminantes». Asimismo, indicó que los vecinos y bañistas de esa zona siguen teniendo problemas cutáneos, ya que «las heridas que presentan algunos de ellos siguen infectándose con el contacto del agua del mar de esa zona».