Greenpeace reprocha al Gobierno vasco que tolere vertidos «de todo tipo» al mar

Vie, 06/08/2004

El Correo

La organización ecologista Greenpeace da una de cal y otra de arena al Gobierno vasco en su informe de julio sobre la situación del litoral. Por el lado bueno, alaba su actuación ante la crisis del 'Prestige' y la mejora en los sistemas de saneamiento y depuración. Por el malo, le reprocha que tolere vertidos «de todo tipo» al litoral y no frene la urbanización «lenta pero imparable» de la costa.

Según Greenpeace, los vertidos «provocan un deterioro continuado de los recursos naturales costeros». Aunque el Ejecutivo autónomo «lleva varios años haciendo esfuerzos» para acabar con la contaminación marina, ésta sigue siendo «una de las grandes asignaturas pendientes de su costa». En cuanto a la edificación cercana al litoral, la organización reclama que sea «gestionada de forma sostenible».

A principios de marzo, quedaban en Euskadi 371 zonas contaminadas por la marea negra del 'Prestige' de forma «ligera» o «muy ligera», además de tramos con otros tipos de polución, como la bahía de Pasajes y la desembocadura del Nervión. Greenpeace destaca al Gobierno vasco como «el más responsable de todos los afectados» por el naufragio del petrolero cargado de fuel, ya que «es el que más datos ha ofrecido y con más transparencia ha hecho pública la información».

El informe señala como «buena noticia» medioambiental la financiación del saneamiento de Urdaibai para evitar la llegada de aguas fecales a la ría. Sin embargo, también recuerda que dos de los proyectos «más conflictivos» son los puertos de Mutriku y Pasajes, ubicados en «zonas de un elevado valor ambiental que es despreciado por las autoridades». Así, recuerdan que Jaizkibel está incluido en diversos listados de áreas «a conservar y proteger».