CASTILLA LA MANCHA .- Barreda se reunirá la próxima semana con el presidente murciano, a petición de Valcárcel, para hablar del trasvase
Dom, 25/07/2004
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, se reunirá el próximo miércoles, 28 de julio, a las 18.00 horas en el Palacio de Fuensalida de Toledo, con el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, en una entrevista solicitada por Valcárcel, y en la que "supone" se hablará de materia hidráulica y del trasvase Tajo-Segura.
El consejero Portavoz del Gobierno regional, Máximo Díaz-Cano, indicó que este encuentro puede servir para hacer "pedagogía política" y para que los ciudadanos puedan conocer "cómo se relacionan dos presidentes de dos comunidades autónomas, que tienen que defender intereses que pueden resultar, y que resultan, contradictorios, y que se pueden plantear tranquilamente desde el debate político sosegado". Esto no significa, confirmó, renunciar "ni un ápice" al posicionamiento sobre la materia que se mantiene en Castilla-La Mancha.
Asimismo, y preguntado por la críticas del PSOE murciano sobre la postura del Gobierno regional ante el trasvase, el consejero dijo que se aceptan las críticas porque son democráticas, y hay que admitirlas con "normalidad y sosiego", dejando claro, destacó, que el Gobierno de Castilla-La Mancha está para atender y defender los intereses regionales, "y no del PSOE de Murcia".
En este sentido, Díaz-Cano anunció que el presidente regional informó al Consejo de Gobierno sobre la posición a mantener desde Castilla-La Mancha en relación a la política hidráulica, y que Barreda expuso al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero en su reunión en La Moncloa, confirmando la idea de que la región es "solidaria" en esta materia y que va a seguir siéndolo, sin ponerse objeción a las necesidades para el abastecimiento a poblaciones de otras comunidades, pero insistiendo en que el agua que no se destine a este uso "van a tener el reparo desde el Gobierno de Castilla-La Mancha".
El consejero aseguró que no se puede aceptar que existan poblaciones en Castilla-La Mancha que no tengan garantizado el abastecimiento, por el trasvase Tajo-Segura, pueda llegar agua a otras regiones para usos de regadío o del sector turístico. Por eso, incidió en la necesidad de replantearse el trasvase porque es una "hipoteca" sobre la Comunidad, que pesa de manera "insoportable".
El consejero Portavoz del Gobierno regional, Máximo Díaz-Cano, indicó que este encuentro puede servir para hacer "pedagogía política" y para que los ciudadanos puedan conocer "cómo se relacionan dos presidentes de dos comunidades autónomas, que tienen que defender intereses que pueden resultar, y que resultan, contradictorios, y que se pueden plantear tranquilamente desde el debate político sosegado". Esto no significa, confirmó, renunciar "ni un ápice" al posicionamiento sobre la materia que se mantiene en Castilla-La Mancha.
Asimismo, y preguntado por la críticas del PSOE murciano sobre la postura del Gobierno regional ante el trasvase, el consejero dijo que se aceptan las críticas porque son democráticas, y hay que admitirlas con "normalidad y sosiego", dejando claro, destacó, que el Gobierno de Castilla-La Mancha está para atender y defender los intereses regionales, "y no del PSOE de Murcia".
En este sentido, Díaz-Cano anunció que el presidente regional informó al Consejo de Gobierno sobre la posición a mantener desde Castilla-La Mancha en relación a la política hidráulica, y que Barreda expuso al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero en su reunión en La Moncloa, confirmando la idea de que la región es "solidaria" en esta materia y que va a seguir siéndolo, sin ponerse objeción a las necesidades para el abastecimiento a poblaciones de otras comunidades, pero insistiendo en que el agua que no se destine a este uso "van a tener el reparo desde el Gobierno de Castilla-La Mancha".
El consejero aseguró que no se puede aceptar que existan poblaciones en Castilla-La Mancha que no tengan garantizado el abastecimiento, por el trasvase Tajo-Segura, pueda llegar agua a otras regiones para usos de regadío o del sector turístico. Por eso, incidió en la necesidad de replantearse el trasvase porque es una "hipoteca" sobre la Comunidad, que pesa de manera "insoportable".