Las aguas aptas para el baño serán más limpias a partir de 2007
Mié, 30/06/2004
Los ministros de la Unión Europea llegan a un acuerdo para aumentar los requisitos de calidad en mares, lagos y ríos.
Las aguas de baño deberán cumplir unos requisitos más exigentes de calidad a partir de 2007, tanto en mares como en lagos y ríos, según el acuerdo político al que ayer llegaron los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (UE).
Los Veinticinco apoyaron que se modifique la actual directiva (ley marco) sobre la calidad de las aguas de baño, que data de 1976, de tal forma que se refleje mejor el avance en los conocimientos científicos. A partir de ahora se abre un plazo de un año para que se pronuncie el Parlamento Europeo.
Según la comisaria europea de Medio Ambiente, Margot Wallstrom, el objetivo prioritario es mejorar la protección de los bañistas, modernizando la gestión de las aguas de baño, y reducir los riesgos de contraer gastroenteritis y enfermedades respiratorias.
La amenaza más grave para la salud humana ligada al baño es el contacto o ingestión de desechos fecales procedentes de aguas usadas, mal tratadas o procedentes del ganado.
Hasta ahora se contemplaban 19 parámetros de análisis para determinar la calidad de las aguas de baño, aunque la modificación supone reducir a dos su número, que serán de tipo microbiológico, completados con una inspección visual y una medición del Ph en las aguas interiores.
Los dos parámetros de indicadores fecales son los enterococos intestinales y los escherichia coli, que proporcionan la mejor correspondencia disponible entre la contaminación fecal y las repercusiones sanitarias en las aguas de recreo.
Agua dulce y salada
La supervivencia de estos dos organismos es diferente en las aguas dulces que en las saladas, de allí que los ministros hayan decidido establecer una evaluación diferenciada entre las playas y las aguas interiores (de ríos, pantanos o lagos). Se permitirá en concreto una mayor concentración en la aguas dulces que en las saladas, lo que está en línea con lo que pretendía España.
Según la ministra española de Medio Ambiente, Cristina Narbona, "España debe dejar de tener esa situación de no cumplimiento de las directivas en materia de calidad de las aguas, y es una prioridad del actual gobierno mejorar y mucho, en todas sus acepciones, de baño o residuales, porque no nos sentimos satisfechos con la situación que tiene actualmente".
El gobierno español desea que se puntualice la terminología de la directiva, y se hable de "condiciones aceptables" para el baño en vez de "condiciones satisfactorias", como propuso la Comisión.
Los países de mayor cumplimiento de las normas de calidad de las aguas costeras son Bélgica (100%), Alemania (99,3%), Grecia (99,4%) y España (97,6%), mientras que en las interiores en España se sitúa alrededor del 90 por ciento, en especial debido a los periodos prolongados de sequía, que perjudican la composición de las aguas, ya que no se renuevan.
Las aguas de baño deberán cumplir unos requisitos más exigentes de calidad a partir de 2007, tanto en mares como en lagos y ríos, según el acuerdo político al que ayer llegaron los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (UE).
Los Veinticinco apoyaron que se modifique la actual directiva (ley marco) sobre la calidad de las aguas de baño, que data de 1976, de tal forma que se refleje mejor el avance en los conocimientos científicos. A partir de ahora se abre un plazo de un año para que se pronuncie el Parlamento Europeo.
Según la comisaria europea de Medio Ambiente, Margot Wallstrom, el objetivo prioritario es mejorar la protección de los bañistas, modernizando la gestión de las aguas de baño, y reducir los riesgos de contraer gastroenteritis y enfermedades respiratorias.
La amenaza más grave para la salud humana ligada al baño es el contacto o ingestión de desechos fecales procedentes de aguas usadas, mal tratadas o procedentes del ganado.
Hasta ahora se contemplaban 19 parámetros de análisis para determinar la calidad de las aguas de baño, aunque la modificación supone reducir a dos su número, que serán de tipo microbiológico, completados con una inspección visual y una medición del Ph en las aguas interiores.
Los dos parámetros de indicadores fecales son los enterococos intestinales y los escherichia coli, que proporcionan la mejor correspondencia disponible entre la contaminación fecal y las repercusiones sanitarias en las aguas de recreo.
Agua dulce y salada
La supervivencia de estos dos organismos es diferente en las aguas dulces que en las saladas, de allí que los ministros hayan decidido establecer una evaluación diferenciada entre las playas y las aguas interiores (de ríos, pantanos o lagos). Se permitirá en concreto una mayor concentración en la aguas dulces que en las saladas, lo que está en línea con lo que pretendía España.
Según la ministra española de Medio Ambiente, Cristina Narbona, "España debe dejar de tener esa situación de no cumplimiento de las directivas en materia de calidad de las aguas, y es una prioridad del actual gobierno mejorar y mucho, en todas sus acepciones, de baño o residuales, porque no nos sentimos satisfechos con la situación que tiene actualmente".
El gobierno español desea que se puntualice la terminología de la directiva, y se hable de "condiciones aceptables" para el baño en vez de "condiciones satisfactorias", como propuso la Comisión.
Los países de mayor cumplimiento de las normas de calidad de las aguas costeras son Bélgica (100%), Alemania (99,3%), Grecia (99,4%) y España (97,6%), mientras que en las interiores en España se sitúa alrededor del 90 por ciento, en especial debido a los periodos prolongados de sequía, que perjudican la composición de las aguas, ya que no se renuevan.