La ONU y Cruz Roja piden ayuda para atender a 10.000 damnificados en República Dominicana y Haití

Sáb, 29/05/2004

ABC

Dos aviones fletados por Cruz Roja Española y la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) saldrán hoy de la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) hacia República Dominicana con materiales de emergencia y ayuda para los damnificados por las inundaciones que han devastado una región fronteriza entre la República Dominicana y Haití.

Medicamentos, material sanitario, mantas, tres plantas potabilizadoras, 2.000 bidones flexibles de agua, 500 toldos plásticos, 1.000 equipos de cocina, 250 mochilas-botiquín y dos carpas multiuso de 90 metros cuadrados cada una, llegarán en esos dos aviones para contribuir al llamamiento hecho a la comunidad internacional ante la devastadora riada, que arrasó la empobrecida comunidad de Jimaní, y que ha dejado ya más de 2.500 muertos o desaparecidos en la región.

La Oficina Nacional de Meteorología dominicana advirtió ayer del peligro de nuevas lluvias en la zona oeste del país, por lo que las autoridades han alertado a los residentes en las cercanías del río Yaque del Norte, ya que los embalses de las presas de la zona están por encima de su nivel y pueden producirse desbordamientos.

Las autoridades dominicanas mantienen la alerta roja en Jimaní, donde el desbordamiento del río Solie, que se inicia en Haití, destruyó dos barrios y se cobró la vida de más de 360 personas, según el último balance.

La evaluación hecha por un equipo de expertos de la ONU no hace más que reforzar el panorama desolador que ya se podía contemplar estos días en las imágenes de los sobrevivientes que, además de a sus familiares, han perdido cultivos, ganado, carreteras, pueblos enteros destrozados por el paso de la riada que carecen de agua potable y electricidad.

Desde Ginebra, la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) pidió casi 600.000 euros para atender a 10.000 damnificados y anunció que ya ha asignado 65.000 euros de su Fondo de Reservas para el Socorro en Casos de Desastre con el objetivo de facilitar la puesta en marcha de las operaciones. Advirtió además de que tendrá que pedir más fondos si la situación sigue empeorando.

Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU recordó que el pasado mes de marzo lanzó un llamamiento de ayuda para Haití, tras los violentos enfrentamientos que desembocaron en el exilio del presidente Aristide, pero ha recibido menos de la mitad de lo que reclamó, por lo que hizo un nuevo llamamiento