López Martos reconoce un “retraso importante” en el Pacto del Agua
Dom, 23/05/2004
ZARAGOZA.- El director general de Aguas del Ministerio de Medio Ambiente, Juan López Martos, considera que el Pacto del Agua de Aragón “está teniendo un retraso grave, incluso en aquellas obras que no tienen ningún problema de contestación social ni ambiental. En cuanto esté el nombramiento del presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, priorizaremos las obras que no tienen problemas. Crearemos un equipo formado por técnicos de la propia Confederación y del Ministerio para realizar un seguimiento permanente. Lo que no parece lógico es tener un acuerdo que avanza tan poco”.
López Marcos asegura que, en el caso de recrecimiento del pantano de Yesa, “se está tratando en el marco aragonés de llegar a un acuerdo para que no se inunde el pueblo. Pero hay que pensar que Yesa es una obra muy importante para un número muy importante de aragoneses: dará de beber al noventa por ciento de la población de Aragón. Parece que puede haber un acuerdo en la capacidad de ese embalse y esperemos no llegar a nuevos litigios.-En Santaliestra, las circunstancias judiciales están mandando y podría haber una solución alternativa, con una balsa de regulación al final y en Biscarrués se están despejando algunos problemas técnicos de cierto calado”. Esos tres proyectos hidráulicos “son clave” y “hay que centrar nuestro esfuerzo para llegar a un acuerdo común, con el mayor consenso posible”. López Martos es consciente de que los temas del agua “son muy pasionales, pero nadie tiene toda la verdad. Por ello, el modelo de trabajo que me gusta seguir en cualquier sitio es hablar con todos los interlocutores”.
Con respecto a los postulados que se defienden en la Nueva Cultura del Agua, el director general del Ministerio de Medio Ambiente explica que, “nosotros también queremos el uso racional del agua, lo que ocurre es que a veces podemos discrepar. Una cosa es que las obras hidráulicas tradicionales cada vez sean menos viables -pues tienen que respetar hasta cuatro viabilidades: territorial, ambiental, económica y social-, y otra cosa es que aunque se cumplan esas condiciones por principio no se haga ninguna, siempre que la obra sea necesaria”.
López Marcos asegura que, en el caso de recrecimiento del pantano de Yesa, “se está tratando en el marco aragonés de llegar a un acuerdo para que no se inunde el pueblo. Pero hay que pensar que Yesa es una obra muy importante para un número muy importante de aragoneses: dará de beber al noventa por ciento de la población de Aragón. Parece que puede haber un acuerdo en la capacidad de ese embalse y esperemos no llegar a nuevos litigios.-En Santaliestra, las circunstancias judiciales están mandando y podría haber una solución alternativa, con una balsa de regulación al final y en Biscarrués se están despejando algunos problemas técnicos de cierto calado”. Esos tres proyectos hidráulicos “son clave” y “hay que centrar nuestro esfuerzo para llegar a un acuerdo común, con el mayor consenso posible”. López Martos es consciente de que los temas del agua “son muy pasionales, pero nadie tiene toda la verdad. Por ello, el modelo de trabajo que me gusta seguir en cualquier sitio es hablar con todos los interlocutores”.
Con respecto a los postulados que se defienden en la Nueva Cultura del Agua, el director general del Ministerio de Medio Ambiente explica que, “nosotros también queremos el uso racional del agua, lo que ocurre es que a veces podemos discrepar. Una cosa es que las obras hidráulicas tradicionales cada vez sean menos viables -pues tienen que respetar hasta cuatro viabilidades: territorial, ambiental, económica y social-, y otra cosa es que aunque se cumplan esas condiciones por principio no se haga ninguna, siempre que la obra sea necesaria”.