Los múltiples anuncios de la paralización del trasvase del Ebro aún no han tenido efecto en las constructoras. El director técnico de Romymar, José María García, aseguró ayer a LA RAZÓN que las obras continúan según lo previsto en el programa, puesto que nadie les ha hecho llegar ninguna notificación que les indique que deben parar la obra. De momento, el único problema que deben solucionar son «algunas dudas que tenemos con los regantes», pero «seguimos trabajando» cada día en esta infraestructura.
Valencia- Las obras del trasvase del Ebro siguen en marcha puesto que el Gobierno no ha comunicado oficialmente la paralización del proyecto. La empresa valenciana Romymar S. A. consiguió con la Unión Temporal de Empresas formada por Torres Cámara y Cia. de Obras S.A., la adjudicación del tramo 31 del trasvase por un importe de 10,7 millones de euros. El plazo de ejecución de la obra es de dos años y se adjudicó el pasado mes de febrero.El director técnico, José María García, de Romymar, aseguró que el ritmo de trabajo no ha sufrido ninguna variación desde que se anunció la intención del Gobierno de derogar el trasvase. Por lo que respecta a la posibilidad de acogerse a las medidas jurídicas anunciadas por la Generalitat, aseguró que ni siquiera se lo han planteado.La batería de medidas jurídicas presentadas por la Generalitat con las que quiere llevar al Gobierno a los Tribunales por derogar el artículo 13 del Plan Hidrológico Nacional, recoge que todos los afectados por el trasvase, como los regantes o los adjudicatarios de los contratos, pueden interponer primero un recurso administrativo al que le seguiría, una vez agotada esta vía, un contencioso- administrativo, con lo que podrían llegar hasta el Tribunal de Justicia de la Comunidades Europeas.Revisión del Júcar- Vinalopó. El nuevo presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues, que tomó ayer posesión de su cargo, se comprometió a revisar todos los proyectos que se encuentran en ejecución en este organismo, incluido el trasvase Júcar- Vinalopó. Explicó que aún tienen que abordar los informes medioambientales y estudiarán si se tiene que realizar alguna modificación para aplicar «la nueva política del agua».Por su parte, el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, anunció ayer que en el próximo pleno del Consell, que se celebrará el viernes, se plasmarán algunas de las iniciativas para apoyar a todos los ciudadanos que se «vean legítimamente atacado por una decisión tan injusta como parar el trasvase del agua del Ebro». Camps, reiteró que este decreto va contra los intereses de la Comunidad y por tanto, el Gobierno valenciano tiene la responsabilidad de hacer todo lo posible para que no sea así» y de atender a los perjudicados.