El nuevo presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, el valenciano Juan José Moragues, declaró ayer, tras tomar posesión de su cargo en la sede del Ministerio de Medio Ambiente, que la prioridad de su gestión será la defensa y transmisión de la denominada nueva cultura del agua. Un movimiento de opinión que aboga por mejorar la gestión de los recursos y el aumento de la calidad del suministro pero que es abiertamente contraria a los trasvases de agua, en concreto el del Ebro y el Júcar al Vinalopó. El responsable de la Confederación, ingeniero de Caminos y catedrático del Departamento de Ingeniería de la Construcción de la Politécnica de Valencia, no citó directamente en sus declaraciones a Efe el tema de los trasvases, pero sostuvo al pie de la letra la teoría defendida por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona y del colectivo que lideró la campaña contra el trasvase del Ebro en Bruselas. Moragues afirmó que tiene el reto «de explicar la nueva política del agua a ciudadanos, empresas, industrias y todos los sectores y organismos implicados». Paradójicamente, en su actividad profesional destaca por ser autor o co-autor de los proyectos de 14 puentes, tanto metálicos como de hormigón armado, así como de edificios. Participó también en los estudios y proyectos para el saneamiento sur de la Albufera y el encauzamiento de los barrancos contiguos, así como en el proyecto para la ampliación del puerto de Dénia. A partir de ahora será el responsable de la política hídrica en la cuenca del Júcar, la misma donde el Gobierno ha abierto el debate sobre la revisión del caudal del futuro trasvase Júcar-Vinalopó.

En este sentido, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, comparecerá mañana en el Congreso para explicar sus medidas alternativas al trasvase. Una inversión de 1.262 millones en la Comunidad Valenciana en los próximos cuatro años para lograr un caudal de 345 hm 3 gracias a la desalación y la reutilización de aguas residuales depuradas.
Por otra parte, el diputado socialista por Alicante, Herick Campos, instó ayer al PP a «que después de 8 años sin traer agua a la Comunidad no continúe con la demagogia y con la utilización el agua como un instrumento electoral para resultados en las europeas.