MURCIA .- Asaja de C-LM traslada al presidente del Gobierno su petición de paralizar el trasvase Tajo-Segura

Mar, 04/05/2004

Europa Press

La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (Asaja) de Castilla-La Mancha ha remitido sendos escritos al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, solicitándoles la inmediata paralización del trasvase Tajo-Segura mientras que se estudian otras alternativas en el Plan Hidrológico Nacional (PHN), así como, las necesidades de agua que tiene esta Comunidad Autónoma.
La organización agraria, según informa en nota de prensa, responde así a la decisión del Gobierno central de suspender las obras del trasvase del Ebro y ante el temor de que ese postulado pueda conllevar posibles incrementos de las cantidades anuales de agua que se trasvasan del Tajo a las cuencas mediterráneas lo que, a juicio de Asaja de Castilla-La Mancha, sería un grave error por tratarse de una cuenca deficitaria.
Haciéndose eco de una antigua reivindicación, Asaja ha instado al Gobierno central "a levantar la hipoteca que pesa sobre el Tajo", al considerar que, después de más de veinticinco años de solidaridad con otras regiones, debe garantizarse también el desarrollo de esta Comunidad Autónoma que ha realizado enormes esfuerzos para ahorrar agua mediante la aplicación de modernos sistemas de regadíos.
Asaja de Castilla-La Mancha lamenta la deuda histórica que en materia hídrica sufre esta región y subraya que la superficie regable existente tan sólo representa un 11 por ciento respecto a la superficie cultivable, a diferencia del 17 por ciento que supone a nivel nacional, lo que merma las posibilidades de tener una agricultura competitiva.
A juicio de la organización, este desagravio se acentúa en una comunidad autónoma como Castilla-La Mancha que tiene numerosas limitaciones que afectan a la producción agrícola y al desarrollo económico.
Por ello, ha hecho un llamamiento al conjunto de la sociedad para que se sume a este posicionamiento y ha pedido que el Plan Hidrológico Nacional que finalmente se aplique fije una verdadera política de aguas para el territorio español y corrija los desequilibrios hídricos existentes, a la vez que sea una apuesta decidida para la mejora y modernización de obras hidráulicas