«Las obras hidráulicas forman parte de la política de aguas, pero la gestión es prioritaria. Las obras serán sólo las convenientes y las necesarias», declaró ayer la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, tras la toma de posesión de cinco altos cargos del Ministerio de Medio Ambiente.
Con esta declaración dejó claras sus intenciones acerca del trasvase del Ebro, cuya derogación como única parte del Plan Hidrológico Nacional volvió a reiterar ayer, aunque precisó que el decreto no se aprobará en el Consejo de Ministros del viernes próximo.
En este sentido, la nueva titular de Medio Ambiente recordó que mantiene su invitación a recibir a los presidentes autonómicos de Valencia y Murcia para explicarles sus planes y que pronto les confirmará las fechas. Añadió que el presidente Zapatero también tiene previsto recibir a todos los presidentes regionales y que probablemente lo haga antes de derogar el polémico trasvase del Ebro. Narbona rebajó ayer el rango de los altos cargos de su Ministerio, para «reducir el gasto público». En vez de un secretario de Estado, será un secretario general quien asuma las competencias del agua bajo la denominación de Territorio y Biodiversidad. Su titular será el ingeniero de Caminos Antonio Serrano. El director general de Aguas será Juan López Martos, que hasta la actualidad era director del Instituto del Agua de Andalucía.
La otra Secretaría General, la de Prevención de la Contaminación y del Cambio Climático, la ocupará Arturo González Aizpiri, doctor en Químicas. Entre sus competencias estará la calidad ambiental, el cambio climático y la meteorología.
Además, María Concepción Toquero, una antigua colaboradora de Narbona, se ocupará de la Subsecretaría del Ministerio.
El director del Gabinete será Juan Manuel de la Torre, quien durante estos años ha estado junto a la actual ministra en sus labores de oposición.
Entre las novedades anunciadas ayer, Narbona declaró que dedicará especial atención a la calidad del agua -especialmente las subterráneas- de todo el país y no sólo del arco Mediterráneo. Ante la acusación de que el PSOE «está pagando un peaje a ERC» por la derogación del trasvase, la ministra recordó los planes alternativos de su partido a esas obras de hace tres años que se debatieron incluso en el Congreso. «Quiero reiterar que no vamos a gobernar por decretazo», dijo la ministra, que añadió que en próximas fechas configurará su posición en la Conferencia Sectorial del Agua, donde se abordarán todos los problemas, incluida la financiación.
«Hemos heredado una situación complicada. Hay un retraso en la presentación de papeles». También indicó que se reunirá con la comisaria europea de Medio Ambiente para que «España no pierda ni un solo euro de los fondos FEDER». En esa reunión también se abordarán los problemas derivados de la renuncia del anterior Gobierno de entregar en plazo -31 de marzo- el Plan Nacional de Asignación de Emisiones, para el que la ministra podría tener calendario tras un encuentro con el área económica del Gobierno. Por último, Narbona dijo que ni el Plan de Energías Renovables ni el de Eficiencia Energética se podrán cumplir «ni de lejos».