La CHG adjudica las obras para abastecer de agua a la comunidad de regantes de Algallarín (Córdoba) desde el embalse de El Arenoso
Vie, 04/07/2014
Confederación Hidrográfica del Guadalquivir
a actuación, que supondrá una inversión de casi 615.000 euros, permitirá un ahorro energético a los usuarios y también mejorar la calidad de las aguas que utilizarán para regar sus cultivos
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, acaba de adjudicar por un importe de 614.698,45 euros el proyecto de abastecimiento de agua desde la presa de El Arenoso para el riego de la comunidad de regantes de Algallarín-El Paraíso, en los términos municipales de Adamuz y Montoro, en la provincia de Córdoba.
La CHG ha finalizado recientemente las actuaciones para la transformación en regadío de esta comunidad de regantes, ubicada en la margen derecha del río Guadalquivir y que cuenta con 628 hectáreas de cultivos.
En ese proyecto técnico de modernización, que ya se ha ejecutado, se contempla que los recursos hidráulicos procederían del cauce del Guadalquivir, si bien en su origen ya planteaba la posibilidad de captar agua desde la futura presa de El Arenoso con el fin de mejorar la calidad del recurso que iría destinado a la comunidad de Algallarín-El Paraíso.
El proyecto que ahora pone en marcha la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir consiste, en primer lugar, en la derivación de las aguas de la estación de bombeo y turbinado de la presa de El Arenoso y la instalación de 2.162 metros de tuberías de conducción de las aguas hasta la estación de bombeo de la comunidad de regantes.
Esta actuación pretende el aprovechamiento de agua de mayor calidad que la proporcionada por el río Guadalquivir, frecuentemente cargada de sólidos en suspensión, así como un importante ahorro energético derivado del aprovechamiento de la energía potencial del agua del embalse, que permitirá el riego sin aporte energético alguno en gran parte de la zona regable.
El proyecto supondrá efectos positivos ambientales derivados de la mejora en las infraestructuras de canalización y riego, lo cual repercutirá en una optimización en la racionalidad, uso y aprovechamiento de los recursos hídricos naturales de la zona, tal y como establece el Plan Hidrológico del Guadalquivir.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, acaba de adjudicar por un importe de 614.698,45 euros el proyecto de abastecimiento de agua desde la presa de El Arenoso para el riego de la comunidad de regantes de Algallarín-El Paraíso, en los términos municipales de Adamuz y Montoro, en la provincia de Córdoba.
La CHG ha finalizado recientemente las actuaciones para la transformación en regadío de esta comunidad de regantes, ubicada en la margen derecha del río Guadalquivir y que cuenta con 628 hectáreas de cultivos.
En ese proyecto técnico de modernización, que ya se ha ejecutado, se contempla que los recursos hidráulicos procederían del cauce del Guadalquivir, si bien en su origen ya planteaba la posibilidad de captar agua desde la futura presa de El Arenoso con el fin de mejorar la calidad del recurso que iría destinado a la comunidad de Algallarín-El Paraíso.
El proyecto que ahora pone en marcha la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir consiste, en primer lugar, en la derivación de las aguas de la estación de bombeo y turbinado de la presa de El Arenoso y la instalación de 2.162 metros de tuberías de conducción de las aguas hasta la estación de bombeo de la comunidad de regantes.
Esta actuación pretende el aprovechamiento de agua de mayor calidad que la proporcionada por el río Guadalquivir, frecuentemente cargada de sólidos en suspensión, así como un importante ahorro energético derivado del aprovechamiento de la energía potencial del agua del embalse, que permitirá el riego sin aporte energético alguno en gran parte de la zona regable.
El proyecto supondrá efectos positivos ambientales derivados de la mejora en las infraestructuras de canalización y riego, lo cual repercutirá en una optimización en la racionalidad, uso y aprovechamiento de los recursos hídricos naturales de la zona, tal y como establece el Plan Hidrológico del Guadalquivir.