La Confederación Hidrográfica del Ebro finaliza una actuación de conservación del río Queiles en la Comarca de Tarazona y el Moncayo (Zaragoza)
Jue, 24/10/2013
Confederación Hidrográfica del Ebro
La Confederación Hidrográfica del Ebro, organismo autónomo, adscrito al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), ha finalizado los trabajos de limpieza y conservación del cauce del río Queiles, en la Comarca de Tarazona y el Moncayo, en Zaragoza. Esta actuación ha supuesto una inversión por parte del Organismo de 73.471 euros por parte del Organismo y su objetivo ha sido la
recuperación de la sección efectiva del río para mejorar la circulación de caudales.
Los trabajos se han llevado a cabo en los términos municipales de Torrellas, Tarazona, Novallas y Malón, en las zonas del río Queiles donde había obstáculos para el discurrir de los caudales. Esta acción también ayuda a la conservación de la vegetación de ribera.
En concreto, en Torrellas se ha retirado vegetación muerta en la zona donde se ubica el “Parque de los Lombacos”. En Tarazona se ha trabajado en dos tramos: en un recorrido de dos kilómetros, entre la balsa de los Zuzones y el “Parque de la cerámica”, aguas arriba del casco urbano y en la salida dirección a Tudela, en unos 800 metros, aguas abajo en este caso de la localidad. En Novallas, se ha actuado aguas arriba del “Parque de la presa”, en unos 400 metros y en Malón, en unos 100 metros de ribera.
La actuación ha incluido una eliminación selectiva de restos vegetales y de residuos sólidos, además de desbroces; podas de ramas partidas o dentro del cauce y retirada de árboles muertos, caídos o enfermos. Todas estas labores se han llevado a cabo respetando el trazado y la configuración del río y no se han talado árboles sanos, ni se han cortado cañas, zarzas o arbustos sanos.
Este proyecto se une a otros dos concluidos recientemente en este mismo cauce, pero en el término municipal de Los Fayos, uno para eliminar taponamientos en cuatro tramos del río y otro para estabilizar y proteger 30 metros de la margen izquierda. Todas estas actuaciones se integran en las actuaciones de conservación de cauces que la Confederación Hidrográfica del Ebro desarrolla en toda la Cuenca para detectar zonas potencialmente peligrosas y mediante la limpieza de márgenes, riberas y
cauces, mejorar la capacidad de desagüe del río y en caso de avenidas, evitar afecciones a poblaciones e infraestructuras.
recuperación de la sección efectiva del río para mejorar la circulación de caudales.
Los trabajos se han llevado a cabo en los términos municipales de Torrellas, Tarazona, Novallas y Malón, en las zonas del río Queiles donde había obstáculos para el discurrir de los caudales. Esta acción también ayuda a la conservación de la vegetación de ribera.
En concreto, en Torrellas se ha retirado vegetación muerta en la zona donde se ubica el “Parque de los Lombacos”. En Tarazona se ha trabajado en dos tramos: en un recorrido de dos kilómetros, entre la balsa de los Zuzones y el “Parque de la cerámica”, aguas arriba del casco urbano y en la salida dirección a Tudela, en unos 800 metros, aguas abajo en este caso de la localidad. En Novallas, se ha actuado aguas arriba del “Parque de la presa”, en unos 400 metros y en Malón, en unos 100 metros de ribera.
La actuación ha incluido una eliminación selectiva de restos vegetales y de residuos sólidos, además de desbroces; podas de ramas partidas o dentro del cauce y retirada de árboles muertos, caídos o enfermos. Todas estas labores se han llevado a cabo respetando el trazado y la configuración del río y no se han talado árboles sanos, ni se han cortado cañas, zarzas o arbustos sanos.
Este proyecto se une a otros dos concluidos recientemente en este mismo cauce, pero en el término municipal de Los Fayos, uno para eliminar taponamientos en cuatro tramos del río y otro para estabilizar y proteger 30 metros de la margen izquierda. Todas estas actuaciones se integran en las actuaciones de conservación de cauces que la Confederación Hidrográfica del Ebro desarrolla en toda la Cuenca para detectar zonas potencialmente peligrosas y mediante la limpieza de márgenes, riberas y
cauces, mejorar la capacidad de desagüe del río y en caso de avenidas, evitar afecciones a poblaciones e infraestructuras.