La filtración por ósmosis inversa elimina más del 99% de los fármacos depositados en las depuradoras
Vie, 21/12/2012
Depuradora de Badajoz (PROMEDIO)
La presencia de contaminantes emergentes, como los productos farmacéuticos, en el medio acuático y sus posibles efectos sobre los organismos vivos se ha convertido en un tema de creciente preocupación para científicos, gestores del agua y la opinión pública.
Un proyecto piloto realizado en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Castell-Platja d'Aro demuestra la eficiencia de eliminación de los productos farmacéuticos, considerados contaminantes emergentes, de las aguas residuales mediante un sistema que integra un biorreactor de membranas combinado con un sistema de ósmosis inversa (MBR-RO).
El proyecto ha sido realizado por el Instituto Catalán de Investigación del Agua (ICRA), el Laboratorio de Ingeniería Química y Ambiental de la UdG (LEQUIA), el Consorcio de la Costa Brava (CCB) y la Empresa Mixta Aguas de la Costa Brava, SA.
En este estudio se evalúa la eliminación de varios fármacos, abarcando un amplio espectro de compuestos farmacéuticos, medicamentos psiquiátricos, antibióticos macrólidos, antiinflamatorios, etc., en un sistema integrado de membranas (MBR-RO) a escala piloto.
Este sistema combina los sistemas de biorreactores de membrana (MBR) con unidades de ósmosis inversa (RO). La tecnología MBR combina la degradación biológica de los contaminantes con una separación física del agua tratada mediante filtración por membranas incorporada en el mismo biorreactor. Si se acopla el sistema MBR a un sistema de filtración por ósmosis inversa posterior, se consigue una filtración del efluente, ya tratado en el MBR, más exhaustiva -un tamaño más pequeño de poro-.
La combinación de tratamiento MBR y RO ha mostrado una excelente eficacia en la eliminación de los fármacos, que ha permitido eliminar más del 99% de todos ellos. Esta elevada eliminación de los contaminantes contrasta con la conseguida con las tecnologías de depuración convencionales utilizadas de una manera más extendida para el tratamiento de aguas residuales urbanas, como es el caso del tratamiento secundario o biológico mediante el sistema de fangos activos, en el que la eliminación de fármacos es incompleta.
Los sistemas de ósmosis inversa suponen una alternativa cada vez más real y necesaria en lugares donde la escasez de agua se está convirtiendo en un gran problema, como es el caso de zonas mediterráneas, alternativas de tratamiento de aguas residuales como la que se presenta en este estudio, permiten el aprovechamiento y la reutilización de esta agua para aplicaciones como la irrigación de campos de golf, campos agrícolas, la recarga de acuíferos o bien para abastecer a los propios ríos con agua tratada, que es de excepcional calidad, con mucha menor presencia de contaminantes que la misma agua de río receptor.
Todo esto tiene como consecuencia una mejora sustancial en la calidad del agua del río, lo cual es especialmente importante, ya que en muchas ocasiones una gran parte del caudal de algunos ríos mediterráneos, especialmente en épocas de sequía, pueden provenir de las descargas de las plantas depuradoras, con lo cual pueden tener altos niveles de contaminación. Además del estado óptimo de un río dependerá la calidad del agua potable que se pueda extraer o, en su caso, puede reducir la cantidad necesaria de recursos energéticos y, por tanto, económicos destinados a la producción de agua potable a las plantas de tratamiento potabilizadoras.
Cabe mencionar que un estudio similar, en el que también participó el ICRA y que fue liderado por IDAEA-CSIC de Barcelona en colaboración con la Agencia Catalana del Agua, se llevó a cabo en el río Llobregat hace un par de años. En esta ocasión el tratamiento que posibilitó la reutilización del agua después del tratamiento biológico fue una filtración seguida de desinfección por luz ultravioleta y cloración.
La presencia de contaminantes emergentes, como los productos farmacéuticos, en el medio acuático y sus posibles efectos sobre los organismos vivos se ha convertido en un tema de creciente preocupación para científicos, gestores del agua y la opinión pública.
Un proyecto piloto realizado en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Castell-Platja d'Aro demuestra la eficiencia de eliminación de los productos farmacéuticos, considerados contaminantes emergentes, de las aguas residuales mediante un sistema que integra un biorreactor de membranas combinado con un sistema de ósmosis inversa (MBR-RO).
El proyecto ha sido realizado por el Instituto Catalán de Investigación del Agua (ICRA), el Laboratorio de Ingeniería Química y Ambiental de la UdG (LEQUIA), el Consorcio de la Costa Brava (CCB) y la Empresa Mixta Aguas de la Costa Brava, SA.
En este estudio se evalúa la eliminación de varios fármacos, abarcando un amplio espectro de compuestos farmacéuticos, medicamentos psiquiátricos, antibióticos macrólidos, antiinflamatorios, etc., en un sistema integrado de membranas (MBR-RO) a escala piloto.
Este sistema combina los sistemas de biorreactores de membrana (MBR) con unidades de ósmosis inversa (RO). La tecnología MBR combina la degradación biológica de los contaminantes con una separación física del agua tratada mediante filtración por membranas incorporada en el mismo biorreactor. Si se acopla el sistema MBR a un sistema de filtración por ósmosis inversa posterior, se consigue una filtración del efluente, ya tratado en el MBR, más exhaustiva -un tamaño más pequeño de poro-.
La combinación de tratamiento MBR y RO ha mostrado una excelente eficacia en la eliminación de los fármacos, que ha permitido eliminar más del 99% de todos ellos. Esta elevada eliminación de los contaminantes contrasta con la conseguida con las tecnologías de depuración convencionales utilizadas de una manera más extendida para el tratamiento de aguas residuales urbanas, como es el caso del tratamiento secundario o biológico mediante el sistema de fangos activos, en el que la eliminación de fármacos es incompleta.
Los sistemas de ósmosis inversa suponen una alternativa cada vez más real y necesaria en lugares donde la escasez de agua se está convirtiendo en un gran problema, como es el caso de zonas mediterráneas, alternativas de tratamiento de aguas residuales como la que se presenta en este estudio, permiten el aprovechamiento y la reutilización de esta agua para aplicaciones como la irrigación de campos de golf, campos agrícolas, la recarga de acuíferos o bien para abastecer a los propios ríos con agua tratada, que es de excepcional calidad, con mucha menor presencia de contaminantes que la misma agua de río receptor.
Todo esto tiene como consecuencia una mejora sustancial en la calidad del agua del río, lo cual es especialmente importante, ya que en muchas ocasiones una gran parte del caudal de algunos ríos mediterráneos, especialmente en épocas de sequía, pueden provenir de las descargas de las plantas depuradoras, con lo cual pueden tener altos niveles de contaminación. Además del estado óptimo de un río dependerá la calidad del agua potable que se pueda extraer o, en su caso, puede reducir la cantidad necesaria de recursos energéticos y, por tanto, económicos destinados a la producción de agua potable a las plantas de tratamiento potabilizadoras.
Cabe mencionar que un estudio similar, en el que también participó el ICRA y que fue liderado por IDAEA-CSIC de Barcelona en colaboración con la Agencia Catalana del Agua, se llevó a cabo en el río Llobregat hace un par de años. En esta ocasión el tratamiento que posibilitó la reutilización del agua después del tratamiento biológico fue una filtración seguida de desinfección por luz ultravioleta y cloración.