El Ministerio abre el periodo de consulta pública del Esquema de Temas Importantes de los planes hidrológicos de Ceuta y Melilla

Mié, 05/12/2012

Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente

El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), a través de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, ha publicado hoy en los boletines oficiales de Ceuta y de Melilla la apertura del proceso de consulta pública del Esquema de Temas Importantes de ambas demarcaciones hidrográficas.

Con este documento se inicia la segunda etapa del proceso participativo para la elaboración de los planes hidrológicos de las Ciudades Autónomas, de acuerdo a la hoja de ruta fijada por el Ministerio para concluir con la aprobación de los planes hidrológicos de todas las demarcaciones, cumpliendo así con el compromiso adquirido con la ciudadanía y con la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea.

En el Esquema de Temas Importantes de Ceuta y de Melilla se analizan las principales cuestiones en materia de planificación y gestión del agua que se presentan en ambas Ciudades Autónomas. Además, se describen las estrategias de actuación, actuales y previsibles, junto con una selección de posibles alternativas para resolver los problemas identificados.

Los documentos estarán sometidos a consulta pública durante un periodo de seis meses, a fin de que la ciudadanía pueda enviar sus alegaciones y sugerencias al equipo redactor de los planes hidrológicos.

ACCESO A LA INFORMACIÓN

Para ello, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha establecido diversas vías de acceso a la información, tanto en formato digital, a través de la web del Organismo (www.chguadalquivir.es), como en papel, disponible en las delegaciones del Gobierno de las dos Ciudades Autónomas y en las respectivas consejerías de Medio Ambiente, así como en la sede de la Confederación en Sevilla.

El Esquema de Temas Importantes tiene como finalidad identificar los principales problemas que deben resolverse con el plan hidrológico y proponer alternativas para su resolución. Es, por tanto, un documento clave para alcanzar los objetivos de la planificación hidrológica: conseguir el buen estado y la adecuada protección de las masas de agua, lograr la satisfacción de las demandas de agua y obtener el equilibrio y armonización del desarrollo regional y sectorial.

Una vez concluyan los procesos hidrológicos de todas las demarcaciones, conociéndose la realidad y necesidades de cada cuenca, el Gobierno confía en abordar un gran Pacto Nacional del Agua que se fundamente sobre una base científica.