Prohibir regar reduce a la mitad el consumo de agua en Alcalá
Mar, 14/08/2012
Alcalá de la Selva, uno de los municipios más turísticos de la provincia, ha reducido a la mitad el consumo de agua con la prohibición del riego de jardines.
El alcalde, Jesús Edo, explicó ayer que el miércoles pasado emitió un bando en el que se instaba a los vecinos a no regar jardines particulares y a hacer «un uso responsable del agua», una medida que ha conseguido rebajar el consumo diario de agua de la localidad de dos millones de litros a uno.
Edo señaló que Alcalá de la Selva posee un extenso parque de viviendas unifamiliares y chalés que suelen contar con una zona verde aneja. La localidad, que está en estas fechas al máximo de residentes por la llegada de veraneantes, dispone del mayor número de segundas residencias de la provincia, con 1.600 viviendas para solo 500 habitantes censados. Ante la existencia de una avería que podía poner en peligro el suministro, el Ayuntamiento optó por emitir un bando prohibiendo el riego de jardines.
El alcalde se mostró agradablemente sorprendido por la respuesta positiva de la población, que ha reducido drásticamente el consumo al suspender el riego de zonas verdes. Jesús Edo añadió que «la gente ha tomado conciencia del problema de la sequía y ha respondido muy bien».
Aunque la avería que motivó la prohibición se ha subsanado, la medida se mantendrá temporalmente parar evitar problemas en una época del máximo consumo por la afluencia de veraneantes, en su mayoría levantinos.
El alcalde explicó que el pueblo está estos días al máximo de su capacidad de acogida, con más veraneantes que en años anteriores. Esta circunstancia multiplica el número de residentes por 12 al pasar de los 500 habituales a 6.000 o 7.000. La ocupación de las segundas residencias obliga al Ayuntamiento a dimensionar sus servicios para atender la demanda estival, incluido el suministro de agua, aunque la mayor parte del año el consumo es inferior.
El alcalde, Jesús Edo, explicó ayer que el miércoles pasado emitió un bando en el que se instaba a los vecinos a no regar jardines particulares y a hacer «un uso responsable del agua», una medida que ha conseguido rebajar el consumo diario de agua de la localidad de dos millones de litros a uno.
Edo señaló que Alcalá de la Selva posee un extenso parque de viviendas unifamiliares y chalés que suelen contar con una zona verde aneja. La localidad, que está en estas fechas al máximo de residentes por la llegada de veraneantes, dispone del mayor número de segundas residencias de la provincia, con 1.600 viviendas para solo 500 habitantes censados. Ante la existencia de una avería que podía poner en peligro el suministro, el Ayuntamiento optó por emitir un bando prohibiendo el riego de jardines.
El alcalde se mostró agradablemente sorprendido por la respuesta positiva de la población, que ha reducido drásticamente el consumo al suspender el riego de zonas verdes. Jesús Edo añadió que «la gente ha tomado conciencia del problema de la sequía y ha respondido muy bien».
Aunque la avería que motivó la prohibición se ha subsanado, la medida se mantendrá temporalmente parar evitar problemas en una época del máximo consumo por la afluencia de veraneantes, en su mayoría levantinos.
El alcalde explicó que el pueblo está estos días al máximo de su capacidad de acogida, con más veraneantes que en años anteriores. Esta circunstancia multiplica el número de residentes por 12 al pasar de los 500 habituales a 6.000 o 7.000. La ocupación de las segundas residencias obliga al Ayuntamiento a dimensionar sus servicios para atender la demanda estival, incluido el suministro de agua, aunque la mayor parte del año el consumo es inferior.