Recursos hídricos

Mié, 27/06/2012

Ideal

Me comentaba esta misma mañana un antiguo alumno, muy preocupado por el tema medioambiental, que era lamentable el mal uso que se le da al agua en este tiempo de crisis y la falta de concienciación. Sin duda, se trata de un gran reto para este siglo XXI, como otras muchas valoraciones, si hablamos de sostenibilidad.

En efecto, tenemos recursos, pero desgraciadamente éstos no son eternos y mucho menos, a nivel global, y según la OMS, demasiados millones de personas, que se dice pronto, no pueden acceder a la obtención de agua potable. O lo hace de manera infrahumana, arriesgando su vida y su deteriorada salud en el intento.

Tocándonos el tema más de cerca, y sabiendo que hay que cuidar lo que tenemos, es necesaria una reflexión. Es preciso cuidar el medio ambiente, desde todos los puntos de vista. Por ejemplo, llevar adelante la correcta limpieza de calles y plazas, ya que, como me decía este chico, que regresaba de la zona del Paseo Marítimo, algunos espacios colindantes están condenadamente sucios. En los referente al tema de la previsión para la supervivencia de los recursos hídricos, es necesario tomar medidas cotidianas y precisas, como cerrar el grifo y no malgastar el líquido elemento, sin duda una motivación para continuar luchando contra el derroche, y también lo es pensar en cuánta agua se necesita para el consumo diario. Se trata de malgasto y, por supuesto, también hay que hablar de algo urgente y por evitar, como es el problema de la contaminación. Todo esto está contemplado entre los objetivos por alcanzar en este milenio que nos ocupa, pero una cosa es la teoría y otra es la práctica.

Venimos del agua y buscamos la supervivencia. Y aún aquí podemos contar con pequeñas restricciones, no así en el mal llamado Tercer Mundo. El problema, por otra parte, no está en la superpoblación del planeta, sino en la debida adecuación del desarrollo sostenible. Es preciso crecer, con infraestructuras y gestiones adecuadas para acceder a mejores recursos, involucrar a las administraciones y a los ciudadanos en general, ya que el agua es nuestro manantial de vida y de futuro.

Se sabe que la distribución del agua es irregular, si hablamos de la geografía a nivel estatal, pero también lo es en nuestra propia provincia. Y ahí es donde hay que arrimar el hombro. La agricultura, la industria, tienen que compartir las normativas ambientales a la hora de buscar una fuente de progreso. Es preciso, como comentaba con mi antiguo alumno, reutilizar y reciclar el agua, hacer buen uso de la depuración y las técnicas que existen en los países desarrollados. En muchos colegios, a nivel educativo, ya se habla, afortunadamente, de concienciación y de medio ambiente, de un consumo necesariamente sostenible. Es preciso que existan buenas vías para el logro de estos retos, mejorar los recursos y, muy especialmente, saber que el agua es un bien que debe alcanzarnos a todos.

Venimos del agua y buscamos la supervivencia. Y aún así podemos contar con restricciones, no así en el mal llamado Tercer Mundo

PUERTA PURCHENA
RAMÓN