EU denuncia al Seprona obras dentro del humedal de Agua Amarga

Vie, 08/06/2012

El País

La condición de zona protegida de la que goza el humedal de Agua Amarga, al sur del término municipal de Alicante, no ha evitado que sea objeto de unas obras que afectan a unos 2.000 metros cuadrados de superficie y que han dañado vegetación y una zona de dunas. Las obras, cuya autoría se desconoce todavía, se han realizado con maquinaria pesada. EU presentó ayer ante el Seprona una denuncia por esta agresión que ha destruido "la morfología y la vegetación de parte del sistema dunar" del saladar entre la carretera de Urbanova y las charcas del humedal. La zona, además, es usada por las aves como espacio para la nidificación en esta época del año.
EU asegura, además, que el Seprona le comunicó que el lunes actuaron de oficio y que ya están investigando esta agresión al Saladar de Agua Amarga. En el escrito de su denuncia, EU reclama que se investigue si las citadas obras tienen las autorizaciones necesarias de la Consejería de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente y de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). El portavoz de la formación, Miguel Ángel Pavón, defiende en su denuncia que los promotores de las obras (igual que las Administraciones si éstas hubieran autorizado esta actuación) podrían haber incurrido en un presunto delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, así como otro presunto delito relativo a la protección de la flora y la fauna.
Restituir lo destruido
Pavón solicita la paralización de las obras que puedan estar realizándose y la "restitución de todos los terrenos afectados a su estado original, incluyendo la recuperación de la morfología y de la cubierta vegetal destruida".
El Saladar de Agua Amarga ha estado sometido en los últimos años a diversas presiones. Este humedal, que también tiene una parte de su suelo en término municipal de Elche, está junto al aeropuerto de L'Altet. La segunda pista de vuelo que contempla el ente Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) en su reforma del plan director para el recinto invadiría el saladar de Agua Amarga. Y este suelo también aparece en el caso Brugal al ser objeto de una supuesta compraventa por parte del promotor Enrique Ortiz, a cambio de suelo urbano en otras áreas de Alicante.