Un fallo contrario a Aguas de Valencia reabre el pulso con Agbar
Sáb, 09/06/2012
El fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana que anula la adjudicación del contrato del suministro de agua a la ciudad de Valencia y su área metropolitana a Aguas de Valencia, que fue elegida como socio privado de una sociedad mixta (Emimet) encargada del servicio, ha reabierto el pulso con Aguas de Barcelona.
La sentencia estima un recurso presentado por Aguas de Barcelona contra el acuerdo de la asamblea de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) celebrada el 31 de julio de 2008, que ahora queda anulado por ser considerado contrario a derecho.
Según fuentes próximas a la empresa barcelonesa, Aguas de Valencia ha incumplido uno de los requisitos de la adjudicación: la financiación de 72 millones de euros -unos 65 en realidad porque un 10% del monto total es el beneficio de la empresa mixta- obras de mejora de la red de suministro durante los primeros cuatro años de vigencia del contrato. De acuerdo con el contrato impugnado, Emimet, la empresa mixta tendría que haber financiado inversiones por importe de 42 millones de euros hasta el año 2010, mientras que según las últimas cuentas depositadas y referidas a este ejercicio solo financió inversiones por valor de 36.000 euros.
Aguas de Valencia niega la mayor y asegura que no se financió ninguna obra nueva a través de Emimet porque la adjudicación estaba recurrida. "Si una adjudicación está recurrida, lo normal es esperar a que se resuelva", explican fuentes de Agua de Valencia. La financiación de las obras por parte de la empresa mixta se recupera a través del cobro del suministro del agua a los usuarios.
La sentencia del Tribunal Superior de Justicia, que rechaza la valoración que se hizo de las ofertas porque la firma que lo hizo no tenía como objeto principal la actividad evaluadora, obliga a puntuar de nuevo las ofertas. Mientras, Aguas de Valencia sigue presentando servicio a través de Emimet pero sin financiar obra nueva.
La sentencia estima un recurso presentado por Aguas de Barcelona contra el acuerdo de la asamblea de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) celebrada el 31 de julio de 2008, que ahora queda anulado por ser considerado contrario a derecho.
Según fuentes próximas a la empresa barcelonesa, Aguas de Valencia ha incumplido uno de los requisitos de la adjudicación: la financiación de 72 millones de euros -unos 65 en realidad porque un 10% del monto total es el beneficio de la empresa mixta- obras de mejora de la red de suministro durante los primeros cuatro años de vigencia del contrato. De acuerdo con el contrato impugnado, Emimet, la empresa mixta tendría que haber financiado inversiones por importe de 42 millones de euros hasta el año 2010, mientras que según las últimas cuentas depositadas y referidas a este ejercicio solo financió inversiones por valor de 36.000 euros.
Aguas de Valencia niega la mayor y asegura que no se financió ninguna obra nueva a través de Emimet porque la adjudicación estaba recurrida. "Si una adjudicación está recurrida, lo normal es esperar a que se resuelva", explican fuentes de Agua de Valencia. La financiación de las obras por parte de la empresa mixta se recupera a través del cobro del suministro del agua a los usuarios.
La sentencia del Tribunal Superior de Justicia, que rechaza la valoración que se hizo de las ofertas porque la firma que lo hizo no tenía como objeto principal la actividad evaluadora, obliga a puntuar de nuevo las ofertas. Mientras, Aguas de Valencia sigue presentando servicio a través de Emimet pero sin financiar obra nueva.