Alcoy rebaja el nivel de cloro en el agua tras enlazar seis meses sin casos por legionella
Jue, 24/05/2012
El Ayuntamiento de Alcoy anunció ayer la rebaja «inminente» de los niveles de cloro en el agua del municipio tras seis meses sin detectar ningún caso de legionella. La medida llega después de numerosas pruebas y análisis, dentro y fuera del laboratorio, que han permitido reducir los niveles de 1,4 ppm (partes por millón o miligramos por litro) a 1 ppm, garantizando la seguridad del agua tanto para el estado de la red como para el consumo humano y la salud. Así lo confirmó el alcalde Toni Francés, acompañado por el edil de Salud Pública, Paco Agulló, y el de Medio Ambiente, Jordi Tormo.
El proceso se inició en diciembre de 2011 con el visto bueno de la Conselleria de Sanidad, que visitó Alcoy para hacer un balance de la situación tras un año en el que se registraron hasta 14 casos de legionela en la comarca. Éste fue el punto de partida de una medida reclamada por el equipo de Gobierno. De hecho, ya en 2009 se registró una bajada del cloro en torno al 1,1 ppm, pero tuvo que rectificarse más tarde por insuficiente.
En su intervención, Tormo recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niveles de cloro sean del 0'8 ppm; mientras que Sanidad los eleva a 1 ppm, siempre que no haya casos excepcionales. Con estas cifras, el Gobierno alcoyano, alentado por una propuesta de la Colla Ecologista la Carrasca y Acampadalcoi rechazada en pleno, declaró la cuestión de la rebaja del cloro como prioritaria.
Durante este periodo, técnicos del Ayuntamiento y de la empresa concesionaria del agua (Aqualia) han trabajado de forma conjunta en un plan de actuación centrado en la investigación en el laboratorio, y más tarde en la aplicación sobre la red. El objetivo era comprobar que la reducción de los niveles de cloro no afectaban en gran medida a los niveles de pH y, por lo tanto, a la desinfección del agua. Así, la comparativa entre 2011 y 2012 confirma que, con una cantidad de cloro de 1,4 ppm el pH se situaba en 7,71. Mientras que por 1 ppm, el nivel tan sólo bajaba a 7,61 y, por lo tanto, la desinfección y la efectividad de la depuración seguía siendo la misma.
Con estos datos sobre la mesa, Sanidad ha dado su ok a empresa y Ayuntamiento para que efectúe una bajada progresiva de los niveles de cloro en la red hasta llegar al 1 ppm, descenso que ya se ha consumado. Entre los efectos inmediatos de esta bajada, según apuntó Tormo, destaca la mejora en el sabor del agua.
En cuanto a la reapertura de las fuentes públicas, el primer edil avanzó que ahora no se plantea esta medida por «cuestiones económicas». Por normativa, estos elementos ornamentales deben contar con un dispensador automático de cloro para garantizar la seguridad del agua; inversión que, por el momento, es imposible de asumir. Aún así, Francés no descartó la posibilidad de abrir alguna fuente emblemática para recuperar «la normalidad en la ciudad».
Por otra parte, el colectivo Salde Alcoy vem l'aqüífer del Molinar rechazó ayer la propuesta de La Española de agrupar sus empresas de la comarca en terrenos próximos a La Canal. Para esta agrupación resulta «descabellada» la intención de la empresa de reabrir el debate tras años de informes negativos y rechazo social. El acuifero ofrece a Alcoy el 80% del agua.
El proceso se inició en diciembre de 2011 con el visto bueno de la Conselleria de Sanidad, que visitó Alcoy para hacer un balance de la situación tras un año en el que se registraron hasta 14 casos de legionela en la comarca. Éste fue el punto de partida de una medida reclamada por el equipo de Gobierno. De hecho, ya en 2009 se registró una bajada del cloro en torno al 1,1 ppm, pero tuvo que rectificarse más tarde por insuficiente.
En su intervención, Tormo recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niveles de cloro sean del 0'8 ppm; mientras que Sanidad los eleva a 1 ppm, siempre que no haya casos excepcionales. Con estas cifras, el Gobierno alcoyano, alentado por una propuesta de la Colla Ecologista la Carrasca y Acampadalcoi rechazada en pleno, declaró la cuestión de la rebaja del cloro como prioritaria.
Durante este periodo, técnicos del Ayuntamiento y de la empresa concesionaria del agua (Aqualia) han trabajado de forma conjunta en un plan de actuación centrado en la investigación en el laboratorio, y más tarde en la aplicación sobre la red. El objetivo era comprobar que la reducción de los niveles de cloro no afectaban en gran medida a los niveles de pH y, por lo tanto, a la desinfección del agua. Así, la comparativa entre 2011 y 2012 confirma que, con una cantidad de cloro de 1,4 ppm el pH se situaba en 7,71. Mientras que por 1 ppm, el nivel tan sólo bajaba a 7,61 y, por lo tanto, la desinfección y la efectividad de la depuración seguía siendo la misma.
Con estos datos sobre la mesa, Sanidad ha dado su ok a empresa y Ayuntamiento para que efectúe una bajada progresiva de los niveles de cloro en la red hasta llegar al 1 ppm, descenso que ya se ha consumado. Entre los efectos inmediatos de esta bajada, según apuntó Tormo, destaca la mejora en el sabor del agua.
En cuanto a la reapertura de las fuentes públicas, el primer edil avanzó que ahora no se plantea esta medida por «cuestiones económicas». Por normativa, estos elementos ornamentales deben contar con un dispensador automático de cloro para garantizar la seguridad del agua; inversión que, por el momento, es imposible de asumir. Aún así, Francés no descartó la posibilidad de abrir alguna fuente emblemática para recuperar «la normalidad en la ciudad».
Por otra parte, el colectivo Salde Alcoy vem l'aqüífer del Molinar rechazó ayer la propuesta de La Española de agrupar sus empresas de la comarca en terrenos próximos a La Canal. Para esta agrupación resulta «descabellada» la intención de la empresa de reabrir el debate tras años de informes negativos y rechazo social. El acuifero ofrece a Alcoy el 80% del agua.