El río Umia afronta el cercano inicio del verano con importantes niveles de microcystis en sus aguas. A pesar del tratamiento con corteza de eucalipto aplicado el pasado mes de julio en el embalse de A Baxe, en Caldas, durante todo el invierno las cianobacterias se han mantenido en niveles elevados en ese punto del cauce fluvial, que a día de hoy quintuplica la cantidad de microcistina que se registraba el año pasado por las mismas fechas. A pesar de que el nivel de vigilancia se ha decretado en todo el río, por el momento la calidad del suministro está garantizada, y en los puntos de captación en los que se toma el agua que bebe O Salnés apenas se percibe la presencia de esta alga tóxica.

En abril, la Xunta incrementó el control sobre el estado de las aguas del Umia.Y es que con el aumento de las temperaturas propio de la primavera y del verano, se crea el caldo de cultivo óptimo para la proliferación de las cianobacterias, que realizan su floración entre los 15 y los 30 grados.

En Ponte Arnelas, donde se ubica la estación de captación de la Mancomunidade, a día de hoy se registran 250 unidades de microcystis por mililitro de agua.

El último análisis realizado, y el del día 30 de abril, cuando la cifra fue de 75 unidades, son los únicos en los que se ha detectado la presencia de la microcistina desde enero. La situación de normalidad es extrapolable al conjunto del cauce fluvial, pues los controles realizados en los últimos meses en Ponte Baión, Segade y Rabuñade han dado resultados similares.

Entre el 23 de noviembre de 2010 y el 10 de mayo de 2011, el embalse de A Baxe, punto más problemático del Umia en lo que a concentración de cianobacterias se refiere, permaneció completamente libre de microcystis. Este invierno, sin embargo,la presa no ha conseguido eliminar la microcystis.

Actualmente la presa de Caldas registra 10.750 unidades por mililitro de agua. El año pasado por estas fechas la cifra era de 2.000.

Aunque a finales de enero la microcistina dio un respiro y desapareció de A Baxe,a mediados de febrero ya se elevaba hasta las 1.750 unidades.Y en general durante lo que va de año se ha mantenido por encima de las 5.000, con picos de hasta 40.500, como el detectado a principios de abril.

La ausencia casi absoluta de lluvias de este invierno puede tener que ver con la resistencia que la microcystis ha demostrado este año en A Baxe en una época en la que debería haber desaparecido. Aunque también el paso del tiempo es un factor a tener en cuenta, pues como explica el director de la Estación de Hidrobioloxía Encoro do Con, Fernando Cobo, el riesgo de que aumente la concentración de cianobacterias aumenta a medida que avanza la edad de los embalses.

Los dos últimos veranos han sido complicados en el Umia, que en 2010 llegó a dejar sin suministro a Caldas a causa de la microcystis. En julio de 2011 se instalaron en la presa sesenta toneladas de corteza de eucalipto