España se promociona en Marsella como un país referente en gestión de agua

Mié, 14/03/2012

EFE

El ministro español de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, promocionó hoy España durante su visita al Foro Mundial del Agua como un país referente en la gestión de ese elemento y buscó abrir la presencia empresarial en otros como Chile o Marruecos.

Pese a reconocer que todavía quedan "muchas infraestructuras hidráulicas por desarrollar", el ministro apuntó a los medios que España es "un referente en gestión de cuencas, en tecnologías, en infraestructuras e incluso en la modernización de regadíos".

Durante su visita al pabellón de España, promovido por su Ministerio y por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), el titular de Agricultura destacó por ejemplo que es "el cuarto del mundo en infraestructuras de almacenamiento", junto a China, Estados Unidos y la India.

El ministro criticó el plan de desaladoras, "que no ha dado resultado por falta de una planificación inteligente", pero alabó en cambio las tecnologías existente en esa materia y cómo estas "se pueden exportar a todo el mundo".

Su presencia en el Foro, donde participará esta tarde en una conferencia ministerial junto a homólogos de unos 80 países, se ha aprovechado además para mantener sendas reuniones con delegaciones ministeriales de Marruecos y Chile.

"Persigo tratar de abrir puertas en el exterior, máximo en un momento en que las restricciones presupuestarias hacen que las obras públicas estén ralentizadas tanto a nivel de Gobierno como en comunidades autónomas", reconoció a la prensa.

Cañete destacó igualmente que "la gestión pueda abrirse a proyectos con países con los que mantenemos buenas relaciones y se pueda participar con el conocimiento que tiene España en el manejo de este recurso".

Representantes de Ecologistas en Acción e Ingeniería Sin Fronteras aprovecharon su presencia para recordarle su petición de que se modifique la Ley de Aguas para incluir la garantía del derecho de los ciudadanos al suministro de agua potable en cantidad y calidad adecuadas y de que la gestión del abastecimiento sea pública.

El ministro, según destacó a los medios Jaume Delclòs, de Ingeniería Sin Fronteras, se comprometió a "estudiar en detalle ambos puntos", cuyo reconocimiento según esos grupos servirá de ejemplo para otros países y contribuirá a mejorar la calidad de vida del conjunto de la ciudadanía.