El Parlament expresa su rechazo a cualquier trasvase de agua del río Ebro
Vie, 24/02/2012
El Parlamento catalán ha aprobado una moción secundada por amplia mayoría en la que expresa el rechazo a cualquier tipo de trasvase de agua del río Ebro e insta al gobierno de la Generalitat a trasladar esta posición al del Estado, y a procurar que se respete el caudal ecológico de los ríos.
La moción, que ha sido presentada por ICV-EUiA, ha contado con los votos favorables de CiU, PSC, ERC, ICV-EUiA y Solidaritat (SI) -además del diputado del grupo mixto Joan Laporta-, mientras que PPC y Ciutadans (C's) han votado en contra.
Según la diputada de Iniciativa Hortènsia Grau, ante la intención del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, de aprobar un nuevo Plan Hidrológico Nacional, era necesario que el Parlamento catalán expresara de forma preventiva su rechazo a la posibilidad de que se proyecte un nuevo trasvase del río Ebro.
Después de apuntar el peligro de que el nuevo gobierno del PP justifique un trasvase del Ebro por motivos técnicos, ha asegurado que en muchas ocasiones "detrás de los criterios científicos también pueden haber criterios políticos".
Grau ha celebrado que CiU se oponga ahora al trasvase del Ebro, cuando en el 2003 estaba de acuerdo, y se ha mostrado convencida de que, con las desalinizadoras y la gestión del agua realizada por el anterior gobierno de la Generalitat "Cataluña tiene garantizados los recursos hídricos, como mínimo, hasta el 2015".
Sobre el déficit de la Agencia Catalana del Agua (ACA), la diputada de ICV-EUiA ha explicado que "hay un problema de infraestructuras y de financiación que nosotros ya heredamos, y lo que hicimos es poner en marcha las obras necesarias para afrontar una nueva situación de sequía".
Desde CiU, la diputada Maritxell Roger ha expresado su apoyo a la moción, aunque esta formación ha juntado sus votos a los de PP y C's para rechazar el punto número dos, con lo cual se deja abierta la posibilidad de impulsar trasvases de ríos distintos al Ebro, como por ejemplo, del Ródano.
Núria Ventura, del PSC, ha considerado que la moción suponía una oportunidad para rechazar los trasvases, y ha reclamado el gobierno de CiU que defienda el Ebro, y que éste "no vuelva a ser moneda de cambio", ya que "nos preocupa -ha dicho- la memoria selectiva que tiene CiU, que parece no recordar que en los años 2002 y 2003 apoyaba los planes del PP con respecto al trasvase del Ebro".
Según Ventura, los trasvases "son obras faraónicas propias de tiempos pasados".
Por parte de ERC, Sergi de los Ríos ha expresado su apoyo total a la moción "ante el nuevo peligro de que el gobierno del PP ponga encima de la mesa otro plan hidrológico nacional que contemple un trasvase del Ebro" y ha celebrado que "en principio, en esta ocasión haya unidad en nuestro país para rechazar una obra como esta".
Después de recalcar que el PP quería el agua del Ebro para hacer realidad "grandes operaciones urbanísticas fantasmas en las costas de Castellón y Alicante", ha indicado que ERC "vigilará" que la posición de CiU favorable a un trasvase del Ródano "no sea una cortina de humo para luego mirar hacia el Ebro".
En contra del texto aprobado se ha manifestado el diputado del PPC Rafael Luna, quien ha recordado que "las proclamas de ICV en favor de una nueva cultura del agua no le impidieron impulsar cuando gobernaba una interconexión de cuencas desde el Segre que al final no fue necesaria".
La moción, que ha sido presentada por ICV-EUiA, ha contado con los votos favorables de CiU, PSC, ERC, ICV-EUiA y Solidaritat (SI) -además del diputado del grupo mixto Joan Laporta-, mientras que PPC y Ciutadans (C's) han votado en contra.
Según la diputada de Iniciativa Hortènsia Grau, ante la intención del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, de aprobar un nuevo Plan Hidrológico Nacional, era necesario que el Parlamento catalán expresara de forma preventiva su rechazo a la posibilidad de que se proyecte un nuevo trasvase del río Ebro.
Después de apuntar el peligro de que el nuevo gobierno del PP justifique un trasvase del Ebro por motivos técnicos, ha asegurado que en muchas ocasiones "detrás de los criterios científicos también pueden haber criterios políticos".
Grau ha celebrado que CiU se oponga ahora al trasvase del Ebro, cuando en el 2003 estaba de acuerdo, y se ha mostrado convencida de que, con las desalinizadoras y la gestión del agua realizada por el anterior gobierno de la Generalitat "Cataluña tiene garantizados los recursos hídricos, como mínimo, hasta el 2015".
Sobre el déficit de la Agencia Catalana del Agua (ACA), la diputada de ICV-EUiA ha explicado que "hay un problema de infraestructuras y de financiación que nosotros ya heredamos, y lo que hicimos es poner en marcha las obras necesarias para afrontar una nueva situación de sequía".
Desde CiU, la diputada Maritxell Roger ha expresado su apoyo a la moción, aunque esta formación ha juntado sus votos a los de PP y C's para rechazar el punto número dos, con lo cual se deja abierta la posibilidad de impulsar trasvases de ríos distintos al Ebro, como por ejemplo, del Ródano.
Núria Ventura, del PSC, ha considerado que la moción suponía una oportunidad para rechazar los trasvases, y ha reclamado el gobierno de CiU que defienda el Ebro, y que éste "no vuelva a ser moneda de cambio", ya que "nos preocupa -ha dicho- la memoria selectiva que tiene CiU, que parece no recordar que en los años 2002 y 2003 apoyaba los planes del PP con respecto al trasvase del Ebro".
Según Ventura, los trasvases "son obras faraónicas propias de tiempos pasados".
Por parte de ERC, Sergi de los Ríos ha expresado su apoyo total a la moción "ante el nuevo peligro de que el gobierno del PP ponga encima de la mesa otro plan hidrológico nacional que contemple un trasvase del Ebro" y ha celebrado que "en principio, en esta ocasión haya unidad en nuestro país para rechazar una obra como esta".
Después de recalcar que el PP quería el agua del Ebro para hacer realidad "grandes operaciones urbanísticas fantasmas en las costas de Castellón y Alicante", ha indicado que ERC "vigilará" que la posición de CiU favorable a un trasvase del Ródano "no sea una cortina de humo para luego mirar hacia el Ebro".
En contra del texto aprobado se ha manifestado el diputado del PPC Rafael Luna, quien ha recordado que "las proclamas de ICV en favor de una nueva cultura del agua no le impidieron impulsar cuando gobernaba una interconexión de cuencas desde el Segre que al final no fue necesaria".