El anteproyecto del nuevo pantano de la costa occidental recibe 16 ofertas
Sáb, 10/12/2011
Todavía queda mucho tiempo, años, para que la Costa del Sol abra el grifo de su nuevo pantano en Marbella, que engullirá a la actual presa de La Concepción y que garantizará el abastecimiento de la zona en los cíclicos periodos de sequía que azotan a la comarca. Descartada la opción que se barajó durante años, que consistía en levantar el muro del actual embalse y que habría puesto en riesgo el suministro de los hogares durante meses, los pasos se encaminan lentos pero seguros hacia la construcción de una nueva infraestructura hídrica. Según el pliego de prescripciones técnicas, al que ha tenido acceso este periódico, se ubicará entre la actual y el viaducto de la autopista AP-7 y permitirá estirar la capacidad de almacenaje de agua desde los 61 hectómetros cúbicos actuales hasta los 135 hectómetros cúbicos.
La burocracia que envuelve a una obra de este envergadura ya ha echado a andar. Primero lo hizo con la licitación de la redacción del anteproyecto para la nueva presa de La Concepción, con un presupuesto base de 654.357 eupor ciento del agua que consumen los municipios de la Costa proviene del pantano. ros y un plazo de ejecución de 18 meses. Ahora, con lo más importante: la expectación que la propuesta ha despertado en el sector. Según informaron a SUR fuentes de la Agencia Andaluza del Agua, en total se han recibido 16 ofertas, la mayoría de uniones temporales de empresas.
En concreto, optan a dar forma a la hoja de ruta del futuro pantano que dará de beber a los municipios de la Costa del Sol las firmas Control y Geología; Eptisa; Oficina Técnica de Estudios; Proyectos y Servicios; Ute Nipsa-Jesús Granell; Ute Acciona-Ingeniería Estudio Pereda 4; Ute Ayesa-Narval; Ute Euroestudios-Consultores Ug21; Ute Iberhidra-Inypsa; Ute Idom-Consultec; Ute Infraesco-Montes y Caminos; Ute Inserco-Ingiopsa; Ute Km-Inoca-Inaser; Ute Typsa-Finwe; Ute Urbaconsult-Incisa; y Ute Vorsevi-Alatec. Los técnicos del organismo analizan ya las propuestas para elegir quién elaborará el anteproyecto.
En sus manos estará poner negro sobre blanco todos los pormenores de la obra, desde los aspectos geológicos hasta las expropiaciones, pasando por los estudios ambientales, los topográficos e incluso el propio presupuesto para levantar las paredes que almacenarán el agua. También deberán orientar sobre los pasos a seguir una vez finalizada la construcción de la presa. Los planes pasan porque el actual pantano de La Concepción quede inundado por el nuevo embalse. El muro final, el que se ubique más al sur, será de mayor altura que el del actual, lo que hará de sistema de vasos comunicantes.
Una vez la Junta tenga el anteproyecto en sus manos, en 2013, tendrá que decidir si saca a concurso de una tacada el proyecto y la obra, una de las más esperadas en la provincia. El próximo enero se cumplirán trece años de la primera vez que se puso sobre la mesa de la entonces Confederación Hidrográfica del Sur la necesidad de recrecer la presa. Se habló de levantar el muro. Nunca prosperó. Hace seis meses la Junta anunció que iba a encargar el anteproyecto para un segundo embalse, un trámite que ahora marcha con paso firme.
Mientras el nuevo pantano salta del papel al terreno, la Costa del Sol sigue pendiente de que la sequía no vuelva a asomar por la provincia, de no bajen demasiado los niveles del embalse de La Concepción y de que la planta desaladora de Marbella, que transforma en agua potable el caudal del mar, esté bien engrasada. Solo tiene capacidad para aportar 20 hectómetros cúbicos de agua al año, menos de una cuarta parte de los que gasta la Costa del Sol en doce meses, pero es una baza importante en situaciones de emergencia. Más aún cuando se le sume la que está prevista en Mijas, que sigue en punto muerto.
La burocracia que envuelve a una obra de este envergadura ya ha echado a andar. Primero lo hizo con la licitación de la redacción del anteproyecto para la nueva presa de La Concepción, con un presupuesto base de 654.357 eupor ciento del agua que consumen los municipios de la Costa proviene del pantano. ros y un plazo de ejecución de 18 meses. Ahora, con lo más importante: la expectación que la propuesta ha despertado en el sector. Según informaron a SUR fuentes de la Agencia Andaluza del Agua, en total se han recibido 16 ofertas, la mayoría de uniones temporales de empresas.
En concreto, optan a dar forma a la hoja de ruta del futuro pantano que dará de beber a los municipios de la Costa del Sol las firmas Control y Geología; Eptisa; Oficina Técnica de Estudios; Proyectos y Servicios; Ute Nipsa-Jesús Granell; Ute Acciona-Ingeniería Estudio Pereda 4; Ute Ayesa-Narval; Ute Euroestudios-Consultores Ug21; Ute Iberhidra-Inypsa; Ute Idom-Consultec; Ute Infraesco-Montes y Caminos; Ute Inserco-Ingiopsa; Ute Km-Inoca-Inaser; Ute Typsa-Finwe; Ute Urbaconsult-Incisa; y Ute Vorsevi-Alatec. Los técnicos del organismo analizan ya las propuestas para elegir quién elaborará el anteproyecto.
En sus manos estará poner negro sobre blanco todos los pormenores de la obra, desde los aspectos geológicos hasta las expropiaciones, pasando por los estudios ambientales, los topográficos e incluso el propio presupuesto para levantar las paredes que almacenarán el agua. También deberán orientar sobre los pasos a seguir una vez finalizada la construcción de la presa. Los planes pasan porque el actual pantano de La Concepción quede inundado por el nuevo embalse. El muro final, el que se ubique más al sur, será de mayor altura que el del actual, lo que hará de sistema de vasos comunicantes.
Una vez la Junta tenga el anteproyecto en sus manos, en 2013, tendrá que decidir si saca a concurso de una tacada el proyecto y la obra, una de las más esperadas en la provincia. El próximo enero se cumplirán trece años de la primera vez que se puso sobre la mesa de la entonces Confederación Hidrográfica del Sur la necesidad de recrecer la presa. Se habló de levantar el muro. Nunca prosperó. Hace seis meses la Junta anunció que iba a encargar el anteproyecto para un segundo embalse, un trámite que ahora marcha con paso firme.
Mientras el nuevo pantano salta del papel al terreno, la Costa del Sol sigue pendiente de que la sequía no vuelva a asomar por la provincia, de no bajen demasiado los niveles del embalse de La Concepción y de que la planta desaladora de Marbella, que transforma en agua potable el caudal del mar, esté bien engrasada. Solo tiene capacidad para aportar 20 hectómetros cúbicos de agua al año, menos de una cuarta parte de los que gasta la Costa del Sol en doce meses, pero es una baza importante en situaciones de emergencia. Más aún cuando se le sume la que está prevista en Mijas, que sigue en punto muerto.