La Consejería de Medio Ambiente, en coordinación con la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), ha iniciado la inundación artificial del humedal de La Nava, que incluye 50 hectáreas de terreno que fueron restauradas en 2010. El proceso se está completando con normalidad a pesar del retraso que se ha producido en la presente campaña, lo que no impide la llegada continua de especies acuáticas.

Cuando se complete la inundación el espacio protegido, estará preparado para acoger miles de aves hasta finales de febrero. En la actualidad, la laguna seminatural cuenta con una superficie de más de 400 hectáreas en los términos de Fuentes de Nava y de Mazariegos, aproximadamente el 10% de la superficie original en el conocido hace décadas como 'Mar de Campos', conformando un enclave de alto valor natural y gran importancia para las aves.

El agua necesaria para inundar cada otoño la laguna, tras ser desecada en verano, se toma del Canal de Castilla a través de una extensa red de ríos y arroyos. A principios de verano, tras la cría de las aves, se interrumpen los aportes de agua y se deja secar la laguna casi totalmente. Al no depender de las precipitaciones, en La Nava se puede reproducir cada año el mejor escenario posible, siendo esto una ventaja con respecto a la escasez de agua que pueden llegar a sufrir otros humedales.

La gestión de este espacio permite además conservar parte de la pradera en condiciones óptimas para el pastoreo manteniendo así su uso tradicional y contribuyendo al desarrollo sostenible de la zona. En La Nava están inventariadas 270 especies de vertebrados, destacando 238 de aves, que suponen aproximadamente el 44% de las especies de aves de toda España de octubre a marzo.