Hacer frente a la creciente brecha entre la demanda de agua y suministro de agua, al mismo tiempo que se pretende alcanzar un buen estado de todos los cuerpos de agua, es un desafío cada vez mayor en todo el mundo. Como parte de la solución, las membranas para aplicaciones de agua están despertando gran interés como respuestas potencialmente rentables para una amplia gama de necesidades de purificación y separación. Una serie de proyectos de investigación comunitarios administrados por la Comisión Europea bajo el tema de Medio Ambiente del Programa Marco de IDT, ha investigado y probado las nuevas tecnologías de membrana a escala de laboratorio a gran escala para el tratamiento de aguas residuales municipales e industriales, así como la producción de agua para beber por vías como la desalación de agua de mar y agua salobre.