Los adelantos en la agricultura van normalmente asociados a alteraciones del medio ambiente. Esto es especialmente cierto en el uso del agua en la agricultura. La población crece y con ella el consumo per capita de agua, lo que afecta a la disponibilidad y calidad de los recursos hídricos, lo que a su vez compromete a los ecosistemas, que son vitales para la regulación, el abastecimiento y la purificación del agua.