Marzo 2006
Introducción:
Una gran presa, según la definición de la Comisión Internacional de Grandes Presas (ICOLD), es aquélla que supera los 15 metros de altura o que con más de 5 metros tiene un volumen de embalse de más de 3 millones de m3.
Las primeras presas se construyeron hace unos 5000 años. Sin embargo el periodo de mayor actividad constructora de grandes presas se sitúa entre 1960 y 1980, especialmente en China, Estados Unidos, India y lo que fue la URSS.
En España el proceso constructor se extiende desde época romana y no en vano el inventario de grandes presas actualmente en explotación se inicia con las de Cornalbo y Proserpina del siglo II.d.C.
Sus funciones son controlar las inundaciones, proporcionar energía hidráulica y suministrar agua para usos domésticos, industriales o regadíos. Proporcionan el 19% de la electricidad mundial total e irrigan el 40% de los territorios mundiales de agricultura de regadío.
Hacia el año 2000 existían en el mundo unas 300 presas de más de 60 metros de altura en construcción. Las autoridades aseguran que será necesario construir muchas más en el futuro a fin de satisfacer la creciente demanda de agua, aunque la armonización de estas infraestructuras con el medio ambiente así como la adecuada seguridad de las mismas son aspectos cada vez más reclamados por la sociedad.
Su construcción no está exenta de la polémica en todo el mundo entre los partidarios de estas obras, como generadoras de riqueza y desarrollo, y sus detractores, que no reconocen un balance positivo entre los beneficios y su riesgo potencial.
España, caracterizada por un régimen hidrológico de extraordinaria irregularidad (en continuo tránsito de la sequía a la inundación), se han construido numerosas presas para paliar las desastrosas consecuencias de estos fenómenos y que garanticen la disponibilidad de agua tanto para el abastecimiento como para las actividades económicas. Así pues, en nuestro país la construcción de nuevas presas sigue siendo defendida por muchos en la misma medida que la mejora de la explotación de los embalses ya existentes.
Actualmente hay más de 1200 grandes presas en España que aportan una capacidad de unos 56.000 hm3. España es el quinto país del mundo después de China, Estados Unidos, India y Japón con mayor número de ellas. Más de 100 de las mismas ya existían en el año 1915 y unas 450 son anteriores a 1960. Estas cifras indican que una parte importante de los esfuerzos debe centrarse en su conservación y reparaciónl, manteniéndolas en unas condiciones óptimas de explotación y seguridad acorde con las exigencias del siglo XXI.
Tradicionalmente las presas han sido un motor de gran importancia para la economía española, generando el agua regulada en los embalses, abasteciendo a la población y generando grandes beneficios económicos, al proporcionar hidroelectricidad, agua para usos industriales etc. En la actualidad, aunque ha bajado su porcentaje de contribución al PIB, siguen generando grandes beneficios económicos.
A su vez, producen beneficios “ocultos”, como es la laminación de avenidas (el embalse se comporta como un inmenso pulmón, en la medida en que, aguas arriba de la presa afluyen caudales crecientes de agua, como consecuencia de la llegada de una onda de avenida, la presa se va llenando y, salvo que se tomen decisiones erradas en la operación de las compuertas de descarga, el caudal que sale de la presa será menor que el que llega, disminuyendo en consecuencia los daños que la avenida provocaría si el embalse no existiera). Este problema constituye el riesgo natural más importante en España, que provoca muchas tragedias personales y grandes pérdidas evaluadas en unos 500 millones de euros por año. Pese a todo, las presas han reducido en gran manera este riesgo.
Sin embargo, las presas también tienen consecuencias negativas, como por ejemplo la reducción progresiva del volumen de agua embalsado debido a los sedimentos que traen los ríos, lo que afecta a las formas de vida acuática. Las desviaciones en los ríos también afectan sus características químicas y biológicas, y esto va en detrimento de sus especies animales nativas. Su construcción en muchos casos también produce movimientos de población.
Pese a que en una visión global puede decirse que los efectos de las presas son beneficiosos, existen cada vez más problemas a nivel mundial para llevar a la práctica proyectos de estas infraestructuras. Las demandas medioambientales, sociales y de seguridad son cada vez mayores, y los proyectos de presas deben cumplir criterios cada vez más exigentes para ser llevados a cabo (en este sentido es actualmente obligatorio para su construcción el cumplimiento del proceso reglado europeo de Evaluación de Impacto Ambiental y las derivadas de su transposición al derecho español).
En nuestro país, algunas voces afirman que el 80% de las grandes presas españolas no siguen las normas de la Instrucción para el Proyecto, Construcción y Explotación de Grandes Presas por los elevados costes económicos que supone hacerlo y que hasta este año, el dinero invertido en conservación es tan escaso que en el Ministerio de Medio Ambiente ni siquiera hay una partida específica.
La distribución de las grandes presas españolas en función de la cuenca hidrográfica a la que pertenecen es la siguiente, según los datos del Ministerio de Medio Ambiente:
Inventario de Presas y embalses (Ministerio de Medio Ambiente):
Este inventario, disponible en Internet, es un instrumento de gestión para controlar el cumplimiento de los requisitos de seguridad de las presas, que incluye, en un sentido amplio, un gran conjunto de datos referidos a las distintas actuaciones que deben llevarse a cabo en las presas. De forma más concreta ofrece información relativa a la tipología de presas, características geométricas, características de la cuenca y de los embalses, usos, etc. de las presas y embalses españoles.
Comisión Internacional de Grandes Presas (ICOLD)
La Comisión Internacional de las Grandes Presas es una organización no gubernamental que pretende ser un foro de intercambio de experiencias y conocimiento sobre la ingeniería de presas. La organización presta a los profesionales las bases para realizar su misión de forma segura, eficiente y con respeto al medio ambiente. Son miembros de esta comisión 83 países. Ofrece artículos, documentos, información sobre congresos, el registro mundial de presas etc.
Comité Español de Grandes Presas (SPANCOLD)
El Comité español tiene como misión el promover el proyecto, la construcción, la conservación y la explotación de grandes presas y embalses. Desde la página web de esta organización se podrá acceder a los distintos servicios que el Comité pone a disposición de los visitantes. Entre otros, información sobre congresos, desarrollo de los trabajos de los distintos comités técnicos, índices de publicaciones, abstracts de ponencias y acceso a compras de las guías y boletines.
Sociedad Española de Presas y Embalses
La Sociedad Española de Presas y Embalses es una Asociación constituida por profesionales y entidades dedicadas a la ciencia, la tecnología y los aspectos medioambientales, económicos y sociales de las presas y embalses, con objeto de contribuir a su mejor desarrollo. Ofrece noticias de actualidad, artículos de opinión, agenda de eventos y publicaciones sobre el tema.
Centro de Estudios Hidrográficos (CEDEX)
Dentro del CEDEX, el Centro de Estudios Hidrográficos es la organización especializada en temas de planificación hidráulica, hidrología, ingeniería de las aguas continentales, así como en los aspectos relacionados con la calidad del recurso, realiza asimismo modelos de presas, etc.
