PROVINCIA
MULTIPLE
LA VERDAD Pág.   Domingo, 12/10/2003

Autor: B. SIRVENT/ALICANTE
 
       
 
ALICANTE / El Ebro vierte al mar 7.426 hectómetros, la mitad de lo que calcula Medio Ambiente 
 
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La empresa constructora del proyecto, Trasagua, rectifica a la ministra Rodríguez. Aún así y en las condiciones más adversas, el desperdicio mínimo sería de 6 trasvases
B. SIRVENT/ALICANTE
EL DATO
Ministerio: en la estación de aforos de Tortosa, el ministerio ha contabilizado entre el 1 de enero y el 30 de septiembre que el agua vertida del Ebro sumó 12.305 hectómetros cúbicos, lo que equivale a doce veces el trasvase al Arco Mediterráneo.

Trasagua: la sociedad pública estatal que contratará y controlará la construcción de las obras del PHN asegura que los caudales totales finales en la desembocadura son 7.426 y las aportaciones naturales en cabecera suman 16.184 hm3.
El río Ebro vierte anualmente al mar en su desembocadura 7.426 hectómetros cúbicos, justo la mitad del caudal que manejó recientemente la ministra de Medio Ambiente, Elvira Rodríguez, para referirse a lo desperdiciado. Ésta se hizo eco hace unos días de la medición de los aforos de la estación de Tortosa entre el 1 de enero y el 30 de septiembre. Según el cálculo oficial del ministerio, se desperdician 12.305 hectómetros, el equivalente a doce trasvases como el contemplado en el Plan Hidrológico Nacional con destino a esta y otras provincias del Levante. La empresa que contratará, construirá y explotará las infraestructuras hídricas, Trasagua, corrige ahora a la ministra y consigna unas cantidades muy distintas.

Trasagua asegura que sin existir la transferencia prevista al Levante, el río Ebro vierte actualmente al mar 7.426 hectómetros cúbicos al año. En el caso de estar construido el trasvase, la cantidad se reduciría hasta los 6.376 hectómetros cúbicos. Este volumen de agua tampoco coincide con los datos aportados por el Ministerio de Medio Ambiente, que habla de 11.250 hectómetros cúbicos de desperdicio directo al mar cuando la transferencia esté en funcionamiento y se destinen al Levante los 1.050 hectómetros cúbicos contemplados en el Plan Hidrológico Nacional.

De todos modos, la cantidad desperdiciada según la estimación de Trasagua daría para seis trasvases a la sedientas comarcas alicantinas y murcianas. La información de Trasagua ha sido facilitada a este diario a través del director de Construcción de la propia mercantil, Nicolás Steegmann López-Dóriga.

De acuerdo con los aforos con los que se ha diseñado el proyecto inicial del trasvase del Ebro, las aportaciones naturales al río son actualmente de 16.184 hectómetros cúbicos y el informe de Trasagua contempla incluso una reducción de éstas del 5% producidas por los posibles efectos a corto y medio plazo del cambio climático.

Trasagua calcula unos usos futuros, suponiendo un aumento del consumo en los próximos veinte años, de 10.774 hectómetros. Los retornos totales al río serían de 2.239 hectómetros y la exportación neta de recursos es actualmente de 223 hectómetros que, incluidos los 1.050 del trasvase al Levante, sumaría 1.273 hectómetros de extracción real de la cuenca del Ebro. Al final, en caso de enviar en el período establecido (ni en primavera ni en verano) el agua a las cuencas del Júcar y del Segura, quedarían en el río y se verterían directamente al mar en la desembocadura de la provincia de Tarragona un total de 6.376 hectómetros cúbicos, o sea, seis veces el trasvase previsto hacia la zona levantina.

Hipótesis conservadora

La empresa que deberá ejecutar las obras del trasvase del Ebro, cuya primera piedra será colocada antes de las elecciones de marzo, según anunció en Alicante hace unos días la ministra Elvira Rodríguez, asegura que ha realizado sus previsiones desde las hipótesis más conservadoras y siempre suponiendo incrementos sin precedentes de la superficie regada en Aragón y otras regiones por las que atraviesa el río Ebro. Trasagua calcula que Argón, cuya superficie actual de riego suma 783.948 hectáreas y cuyo consumo de agua para riego es de 6.310 hectómetros cúbicos anuales, no superará los 9.879 hectómetros cúbicos de agua en riego aun cuando en el horizonte de los próximos veinte años creara medio millón de hectáreas nuevas de agricultura de regadío.

Trasagua recuerda que el PHN prevé una transferencia máxima de 190 hectómetros cúbicos anuales para las cuencas internas de Cataluña, 315 hectómetros para la cuenca del Júcar, 450 para la del Segura y 95 para la cuenca hidrográfica del Sur. Se derivará agua del Ebro a las otras cuencas si por el río circula un caudal superior a la suma del mínimo ambiental fijado en el plan del Ebro más las concesiones aguas debajo de las tomas.