ALBACETE MULTIPLE	LA VERDAD	Pág.   Martes, 03/02/2004 Autor: LA VERDAD/ALBACETE
	Sequía y contaminación amenazan los humedales
	Albacete
	Pie de foto:OSSA DE MONTIEL. La sequía ha sido siempre el gran problema de las Lagunas de Ruidera./ LA VERDAD
	[6965 Caracteres] Las organizaciones ecologistas critican los resultados de los planes de conservación Ayer se celebró el día mundial de estos espacios naturales LA VERDAD/ALBACETE OSSA DE MONTIEL. La sequía ha sido siempre el gran problema de las Lagunas de Ruidera./ LA VERDAD HUMEDALES HUMEDALES Espacio Natural Protegido Laguna de Pétrola: 1.940 hectáreas. Laguna de Alboraj: Microrreserva. 11 hectáreas de superficie. Laguna de El Arquillo: Monumento natural. Lagunas de Ruidera: Parque Natural. 3.772 hectáreas. En tramitación Laguna de Pétrola: 1.940 hectáreas. Saladar de Cordovilla: 415 hectáreas, en Tobarra. Laguna de los ojos de Villaverde: 6.203 hectáreas. Laguna de Tiriez: 325 hectáreas. HUMEDALES EN LA RED NATURA: En Albacete, Laguna de los ojos de Villaverde, Laguna del Arquillo, Lagunas Saldadas de Pétrola y Salobrejo y Complejo Lagunar de Corral Rubio, Lagunas de Ruidera y Saladares de Cordovilla y Agramón y Laguna de Alboraj. Un total de 76 de los al menos 450 humedales naturales y artificiales que hay en Castilla-La Mancha cuentan con algún tipo de medida de protección y conservación específica, según indicó ayer la consejera de Medio Ambiente, Rosario Arévalo. Sin embargo, Ecologistas en Acción considera que esta protección está fracasando en lo más importante, es decir, «en proteger eficazmente los ecosistemas que albergan». Y en ello tiene buena parte de la culpa, indican los ecologistas, además de la Junta de Comunidades, el Ministerio de Medio Ambiente y las Confederaciones Hidrográficas. Asimismo, los responsables de la organización ecologista Adena mostraron su decepción por el estado de conservación de los humedales manchegos y acusaron a la administración de practicar «una política de gestos claramente ineficaz en materia medioambiental». Con motivo de la celebración del Día Mundial de los Humedales, la consejera se desplazó a las Lagunas de Puebla de Beleña (Guadalajara), el último paraje castellano-manchego incluido en la Lista de Humedales de Importancia Internacional de la Convención Ramsar. Rosario Arévalo afirmó que el Plan Especial de Conservación de los Humedales del Gobierno de Castilla-La Mancha está resultando un instrumento eficaz para proteger y mejorar «un bien único y preciado que todos debemos cuidar», como son los humedales de la región, que ocupan una superficie de más de 82.000 hectáreas. Monumentos Arévalo aseguró que el plan, que cumple las directrices establecidas por la Ley de Conservación de la Naturaleza de Castilla-La Mancha, ha impulsado la protección de los humedales más representativos, a través de figuras como la de parque natural, reserva natural, monumento natural, microrreserva, refugios de fauna o zonas de caza controlada. Arévalo explicó algunas de las actuaciones que está acometiendo el Gobierno regional para la conservación de los humedales, como limitar la actividad cinegética para favorecer el aumento de la avifauna, adquirir parcelas colindantes con el mismo objetivo, suscribir convenios de colaboración con algunos propietarios para favorecer la presencia de especies o elaborar censos anuales para el seguimiento de las aves invernantes y estacionales. El plan contempla otras medidas de conservación de los humedales, como la obligación de establecer caudales ecológicos, la exigencia de autorización para cualquier actuación que suponga la modificación de la composición o estructura de su vegetación y fauna acuática, la prohibición de realizar alteraciones bruscas de su nivel y la necesidad de evaluación ambiental para actividades industriales que pudieran contaminar las aguas. Añadió que la celebración del Día Mundial de los Humedales, fecha con la que se conmemora la firma de la Convención Ramsar hace ahora 33 años, es «una inmejorable oportunidad» para recordar la importancia que tienen los humedales. Recordó que los humedales poseen altos valores ecológicos por su flora, la vegetación asociada y algunas especies de fauna muy específicas que albergan, además de contribuir a la retención de sedimentos y nutrientes, a la depuración de aguas o a la mitigación del cambio climático. También destacó sus valores culturales y los usos de carácter recreativo, lúdico o turístico que tienen y que suponen una fuente de riqueza y empleo para los vecinos de los municipios que albergan estos espacios naturales. Suspenso Sin embargo, Ecologistas en Acción, con motivo de la celebración ayer del Día de los Humedales, ha denunciado el mal estado de conservación de los humedales castellanomanchegos, ya que consideran que la política de protección de la Junta de Comunidades y del Ministerio de Medio Ambiente no es eficaz para detener el deterioro generalizado de las zonas húmedas. En nota de prensa, Ecologistas señala que la región, y a pesar de contar, al menos sobre el papel, con la mayor parte de sus zonas húmedas amparadas bajo alguna figura de protección, mantiene estos productivos y ricos ecosistemas en un lamentable estado de conservación. El agua Consideran que la contaminación de las aguas, fundamentalmente proveniente de núcleos urbanos, pero también de focos industriales y agrícolas, y la falta de caudales, por sobreexplotación de acuíferos y aguas superficiales, han llevado a los humedales a un estado generalizado de degradación que se ve reflejado en la pérdida de la vegetación acuática y riparia y en el descenso del número de especies de fauna presentes. El paradigma de esta situación lo representa el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, señalan, un espacio que «hoy en día, debido a las condiciones de artificialidad en las que se mantiene, es más parecido a un parque temático que a un espacio natural». Así, indican que sólo los aportes del trasvase Tajo-Segura, retenidos además por la presa de Puente Navarro, permiten mantener bajo mínimos las Tablas de Daimiel que, de otra forma, «ya habrían desaparecido ante la falta de voluntad política por resolver el problema de la sobreexplotación del acuífero 23». Además, las perspectivas para el futuro «no pueden ser menos esperanzadoras», el borrador del Plan Especial del Alto Guadiana presentado por la Confederación Hidrográfica, en el mejor de los casos, esto es, si se pone coto al despilfarro de agua y a los regadíos ilegales y llueve por encima de la media, «deja para dentro de 35 años el momento en que vuelvan a correr las aguas por los Ojos del Guadiana. Muchos de nosotros nunca lo veremos», aseguran. En menor grado, pero con consecuencias similares, muchos otros humedales se encuentran amenazados, como las lagunas de Ruidera por la sobreexplotación del acuífero 24 y por la saturación urbanística, la lagunas de La Mancha por los vertidos sin depurar y las roturaciones, los refugios de fauna de los embalses del Tajo por la contaminación del río y la falta de caudales, y buena parte de las 65.000 de hectáreas de humedales existentes en la región.