REGIONAL VALENCIA AGT Recepción: 15:54	Europa Press	Pág.   Jueves, 29/05/2003 Autor:
	COMUNIDAD VALENCIANA .- PHN .- CHA dice que el Gobierno reconoce que los 'excedentes' de la riada de febrero 'son difícilmente almacenables'
	[2024 Caracteres] Chunta Aragonesista (CHA) ha indicado que el Gobierno central reconoce, ahora en respuesta a una pregunta del diputado José Antonio Labordeta, que los "excendentes" de la gran riada del Ebro del pasado mes de febrero "son difícilmente almacenables". El secretario general de CHA, José Antonio Acero, ha manifestado que "esperamos también una rectificación en sus palabras y un gesto de respeto, por parte de los representantes del PP en Valencia y Murcia, que demostraron una enorme bajeza moral aprovechando las terribles riadas del Ebro para justificar el trasvase, a sabiendas del demagógico razonamiento, reconocido incluso por el Gobierno". El diputado de Chunta Aragonesista (CHA), José Antonio Labordeta, presentó una serie de preguntas por escrito el pasado 11 de febrero de 2003, a raíz de las riadas ocurridas en Aragón por la crecida del Ebro. Labordeta preguntó si "piensa el Gobierno realizar un Plan de Gestión ambiental de las Riberas del Ebro, para prevenir, en condiciones, las posibles riadas que puedan ocurrir y si sigue afirmando el Gobierno que la última riada del Ebro justifica el trasvase contemplado en el PHN". La respuesta, fechada el pasado 16 de mayo de 2003, indica que "los sucesos de crecida (caudales máximos) son aleatorios y se presentan con una cierta probabilidad en todos los ríos en función de las condiciones metereológicas y del estado de las cuencas de los mismos. Los caudales extraordinarios producidos por una avenida son difícilmente almacenables en su totalidad". José Antonio Acero apunta que "ahora el Gobierno sale de manera contundente contra las afirmaciones de destacados dirigentes de su partido en Valencia y Murcia. Demasiado tarde porque el daño moral está hecho, aprovecharon en plena riada y catástrofe natural para justicar el trasvase. Lo mínimo que podemos exigir ahora es una rectificación de sus palabras, por dignidad y por respeto a los aragoneses, navarros y riojanos afectados por la crecida del Ebro".