REGIONAL EXTREMADURA
AGT Recepción: 11:56
Europa Press Pág.   Lunes, 11/08/2003

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EXTREMADURA .- Ecologistas en Acción denuncia que la mina de Aguablanca, que afecta a Badajoz, pone en riesgo aguas para consumo humano 
 
     
     
 

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> Ecologistas en Acción de Extremadura ha denunciado hoy que el futuro proyecto minero de Aguablanca, que se ubica en pleno corazón de Sierra Morena en los Parques Naturales de la Sierra Norte y de Aracena y Picos de Aroche, entre El Real de la Jara en Sevilla, Santa Olalla de Cala en Huelva y Monesterio en Badajoz, afectará gravemente la calidad de las aguas del río Ribera del Cala, que actualmente se utilizan para consumo humano.
Este proyecto promovido por la empresa Narcea Gold Mines S.A., que pretende llevar a cabo la explotación de la mina Aguablanca para la extracción de niquel, se situará junto al río Ribera del Cala y, según los conservacionistas, "es similar al de Boliden en Aznalcóllar con una balsa minera de las mismas características para la recogida de lodos mineros y una planta de tratamiento del mineral que ocuparán unas 100 hectáreas y una Corta minera a cielo abierto de 23 hectáreas, más una escombrera de 110 hectáreas".
En una nota remitida a Europa Press, la organización explica que el río Cala está actualmente regulado para abastecimiento urbano a través de dos pantanos que se ubican en su cuenca, el pantano del Cala en El Ronquillo y el Gergal en Guillena que forman parte de los cinco pantanos que suministran agua a Sevilla y su área metropolitana. Este nuevo proyecto minero generará vertidos con alta carga de metales tóxicos y peligrosos como cadmio, arsénico, zinc y mercurio entre otros, con el riesgo constante, además, de rotura de la balsa que se ubica junto a este río con las graves consecuencias que supone.
En la actualidad el proyecto minero Aguablanca, tiene otorgada la Declaración de Impacto Ambiental por parte del Ministerio de Medio Ambiente y recientemente ha sido aprobado también por el Consejo de Ministros, sin que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, organismo dependiente de este Ministerio, haya rechazado el proyecto.
Ante esta situación Ecologistas en Acción exige que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, organismo responsable, aplique la Ley de Aguas que prohíbe cualquier extracción o vertido minero a ríos regulados para uso de consumo humano como es el caso del río Cala, y que obligue al Ministerio de Medio Ambiente a paralizar dicho proyecto al poner en riesgo los pantanos de Cala y Gergal, esenciales para el suministro de agua de Sevilla.
Ecologistas en Acción ha solicitado también a la Consejería de Medio Ambiente de Andalucía que actúe contra el Ministerio para la paralización del proyecto por las graves consecuencias ambientales y sociales que supone, teniendo las competencias en la conservación de flora y fauna del río Cala. Asimismo, la federación ecologista solicitará de la Unión Europea la retirada de toda financiación a este proyecto.