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El Norte de Castilla Pág.   Jueves, 02/10/2003

Autor: EL NORTE/PALENCIA
 
       
 
La CHD descubre un vertido de lejía al analizar el agua del embalse de Lomilla  
 
  PALENCIA   
  Pie de foto:Truchas muertas en el pantano de Lomilla. / JUAN CARLOS ÁLVAREZ    
 

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El producto detectado suele utilizarse en la pesca furtiva de truchas
EL NORTE/PALENCIA
Truchas muertas en el pantano de Lomilla. / JUAN CARLOS ÁLVAREZ
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha descubierto restos de lejía en los análisis efectuados a las aguas del embalse de Lomilla, próximo a la localidad palentina de Aguilar, donde la pasada semana aparecieron unos doscientos kilogramos de peces muertos -carpas y truchas, fundamentalmente-, según precisaron fuentes de este organismo.

La Confederación del Duero ha realizado análisis tanto del embalse como de los ríos Reitobas -del que se abastece el pantano- y Pisuerga, aguas arriba y abajo. En el agua del embalse y en el río los análisis han encontrado unos niveles muy elevados de cloroformo -12 unidades por litro, lo que significa diez veces más que los valores normales del agua.

Cloroformo en el agua

Con este resultado, la Confederación estima que se ha producido un vertido «puntual» de lejía -el cloroformo es un componente esencial de la lejía- en el agua embalsada en Lomilla, con capacidad para matar los ciprínidos. Este producto ha sido vinculado en diversas ocasiones a las prácticas de la pesca furtiva, ya que tiene unos efectos fulminantes sobre los peces, especialmente sobre las truchas, que en pocos minutos quedan flotando sobre las aguas, sin que por ello dejen de ser comestibles, debido a que el cloroformo se evapora con facilidad, lo que inicialmente sustenta la tesis de la pesca furtiva.

La hipótesis se refuerza, además, con el hecho de que no existen fábricas que trabajen con estos componentes aguas arriba y abajo de la confluencia de ambos ríos, surtidores del embalse. En los próximos días, la Confederación Hidrográfica del Duero realizará nuevos análisis a ambas cuencas fluviales para comprobar si el agua recupera sus valores habituales y se ha evaporado el cloroformo encontrado en los primeros análisis.

Por su parte, la Delegación Territorial de la Junta se encuentra a la espera de los resultados toxicológicos que un laboratorio de Madrid está efectuando a algunos de los peces que fueron hallados muertos en la presa de Lomilla. Los resultados serán claves para determinar su grado de coincidencia con los hallazgos de la Confederación del Duero en sus investigaciones.