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AGENCIAS/MURCIA/ZARAGOZA
El presidente del Gobierno, José María Aznar, mantiene la fecha del año 2007 para que las aguas excedentarias del Ebro lleguen a las cuencas del Júcar y Segura, según se lo hizo saber al presidente de la Generalidad Valenciana, Francisco Camps, a quien recibió en La Moncloa. La misma previsión transmitirá con toda probabilidad al presidente murciano, Ramón Luis valcárcel, con quien se reunirá el próximo día 29.
Mientras que el Gobierno de la Nación mantiene sus planes, el frente opositor al trasvase del Ebro no cesa en su campaña para poner trabas al proyecto. El consejero de Medio Ambiente de Aragón, Alfredo Boné, declaró ayer que espera superar las 1.000 alegaciones al trazado del trasvase del Ebro y al estudio de impacto ambiental, que el Gobierno presentó el pasado 2 de julio. Asímismo, apuntó que también se enviarán las recibidas desde otros colectivos, independientemente de que ellos las remitan directamente, y es que, a las alegaciones del Gobierno aragonés se añadirán otras 1.000 procedentes del sindicato UGT, así como las que se están recogiendo de otros colectivos de forma «sorprendente y gratificante», afirmó Boné.
Su homólogo de Cataluña, Ramon Espadaler, advirtió ayer que la Generalitat «llevará a los tribunales» al Gobierno por incumplir el Plan Hidrológico, si el próximo día 31 el Consorcio para la Preservación del Delta no alcanza un acuerdo sobre el caudal que el Ejecutivo catalán considere «garantista». Se mostró convencido de que «no puede extraerse del Ebro 1.050 hectómetros cúbicos anuales» y advirtió que «no nos bajaremos del burro».
Por último, la fiscal especial del Medio Ambiente de la Amazonía de Brasil, María José da Silva Nazare, dijo ayer en los cursos de verano de la Universidad de Alicante (UA), en Finestrat, que los déficit de agua en Murcia, Almería y Alicante deben resolverse con alternativas distintas a las del PHN.
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