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Domingo, 14/12/2003 Autor: |
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Los regantes confían en paliar el impacto del agua salada en el Xúquer con el nuevo azud |
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[2836 Caracteres] La Universitat constató que la salinidad del río a 3 kilómetros de la desembocadura es casi tan alta como la del mar. Los agricultores minimizan el efecto del trasvase al Vinalopó. Maite Nácher, Cullera El Sindicato de Riegos de Cullera se ha pronunciado al respecto del estado de salud del río Xúquer, en concreto en su parte sur, la más afectada por la salinización que sufren las aguas. Los regantes vaticinan que una vez terminadas las obras del nuevo azud de la Marquesa, éste aminorará el impacto del agua salada en el río. Manuel Gomis, presidente del sindicato de riegos, aclara que no existe preocupación entre los regantes cullerenses, dado que los cultivos del término de Cullera no se riegan con agua procedente de la parte más meridional del río, la más salinizada, sino que se toman «aguas fluyentes y las que proceden del pantano». Gomis opina además que la Confederación Hidrográfica del Xúquer terminará de habilitar el nuevo azud de la Marquesa entre finales de 2004 y principios de 2005. Las primeras estimaciones de un estudio encargado por la Fundació Nova Cultura de l´Aigua a la Universitat de València han constatado que la salinidad del río a la altura del azud, situado a tres kilómetros del mar, es de 30 gramos por litro, cuando el agua marina tiene una salinidad de 36 gramos por litro. Los regantes cullerenses han expresado también su seguridad de que el río no se verá afectado por el trasvase Xúquer-Vinalopó. Gomis confía en que las obras de modernización del riego en la Ribera Alta permitirán ahorrar los 200 hectómetros cúbicos de agua que se necesitan para hacer posteriormente el trasvase. «Existe el acuerdo de que mientras las obras de modernización no se terminen, no se realizará el trasvase», aclara Manuel Gomis. Los partidos de la oposición en el ayuntamiento, sin embargo, no se muestran igual de optimistas. El grupo municipal de Alternativa Progressista de Cullera (APC) presentó en el último pleno celebrado por el consistorio una moción que pedía la paralización de las obras del trasvase Xúquer-Vinalopó, la revisión del Plan Hidrológico de la Cuenca del Xúquer y la apertura de un debate social sobre el futuro del río. Esta propuesta fue aprobada por unanimidad en la sesión plenaria, hecho que provocó la perplejidad de los socialistas ante el voto a favor de la moción del Partido Popular. El portavoz del PSOE, Joan Grau, ha vuelto a manifestar en los últimos días que el trasvase destinado a las comarcas alicantinas «hará mucho daño» a la Ribera. Grau considera una «desfachatez que el PP esté de acuerdo con el trasvase en otros sitios, y en Cullera se vote a favor de esta moción. Es una táctica para no perder ninguna actuación». El líder socialista se mostró convencido de que los populares «no van a hacer nada más para oponerse al tema». |
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