REGIONAL comunidad MULTIPLE	LEVANTE	Pág.   Lunes, 02/06/2003 Autor:
	El 24% de las depuradoras vierte el agua tratada con deficiencias de calidad
	[2482 Caracteres] Obras Públicas achaca los problemas a la falta de rendimiento o capacidad de las plantas Maria Josep Picó, Valencia El 24% de las estaciones depuradoras de aguas residuales de la Comunidad Valenciana vierte caudal depurado -con destino a cauce, riego o mar- de una calidad deficiente, según la Conselleria de Obras Públicas. Los problemas en el tratamiento del caudal «obedecen a diversas causas que pueden provocar situaciones puntuales de falta de rendimiento en las instalaciones, o bien, situaciones continuadas que obligan a mejorar o modificar el sistema de tratamiento existente (lagunajes, falta de capacidad)», apunta el borrador del II Plan de Saneamiento de la Comunidad Valenciana. La calidad del efluente es precaria en un total de 85 depuradoras, de las que 49 atienden una población menor de 2.000 habitantes equivalentes; 24 plantas tienen una capacidad que oscila entre los 2.000 y los 15.000 y las 12 restantes soportan una carga de más de 15.000 habitantes equivalentes. Las infraestructuras de mayores dimensiones con incidencias destacables en el caudal obtenido son: Monte Orgergia (Alicante), Almoradí 2, Benferri y la Murada, Castelló de la Plana, Font de la Pedra (Cocentaina), Derramader (Crevillent), Guardamar del Segura, Horta Nord, Ontinyent-Agullent, Santa Pola y Pinedo 2 (Valencia). Entre los impedimentos que afectan al buen funcionamiento de las infraestructuras de depuración destaca la recepción de vertidos industriales. «La contaminación de origen industrial que entra en las plantas impide el desarrollo adecuado de los procesos de depuración y repercute en el rendimiento de las instalaciones», apunta la conselleria, que agrega que se trata de sistemas sin problemas de diseño o dimensionamiento para atender las aguas domésticas. Sustitución o acondicionamiento En otras depuradoras, los sistemas de tratamiento (lagunaje o lecho de turbas) no permite alcanzar la óptima calidad del efluente y, en consecuencia, «sería conveniente su sustitución», avanza el II Plan de Saneamiento con previsiones hasta 2008. Debido a la incorporación de nuevas zonas o por recientes desarrollos urbanísticos, algunas depuradoras han quedado pequeñas para tratar el caudal recibido, mientras que otras plantas, generalmente antiguas, arrastran deficiencias estructurales o de equipos que requieren ser resueltas «mediante su renovación o acondicionamiento», admite el documento expuesto al público a finales del pasado marzo.