REGIONAL aragon	El Heraldo	Pág.   Martes, 16/12/2003 Autor: CARLOS VILLANOVA. Zaragoza
	La UE prohíbe compensar con caudales del Ebro la transferencia Júcar-Vinalopó
	El Gobierno central dice en Europa que el Júcar es excedentario y en España mantiene que tiene un gran déficit.
	Pie de foto:Debate sobre el trasvase del Ebro en el Parlamento Europeo el pasado noviembre
	[4065 Caracteres] La Comisión Europea financiará parte del trasvase Júcar-Vinalopó, incluido en el Plan Hidrológico Nacional, pero con la estipulación de que esa cesión de agua no sea compensada en ningún caso con caudales procedentes del Ebro. Así, según informó la DGA, quedó decidido ayer en el documento firmado por el comisario europeo de Política Regional, Michel Barnier, que autoriza la concesión de fondos para la transferencia entre esos dos ríos levantinos. El texto explicita que "no habrá ningún trasvase, directo o indirecto, del río Ebro hacia la cuenca hidrográfica del Júcar que pudiera tener como consecuencia la compensación de las pérdidas de caudal" detraído para el Vinalopó, ya que esa agua que se transfiera debe provenir "de los ahorros de agua en irrigación" conseguidos en el Júcar. El documento de Barnier va aún más allá al manifestar que el Estado español "considera la cuenca del Júcar excedentaria", por lo que cualquier necesidad que se plantee por la cesión de caudales al Vinalopó no puede compensarse con aportaciones ajenas a la cuenca "antes de 2020". La afirmación del comisario contradice el espíritu y la letra del PHN, que sí habla de la necesidad de llevar 315 hectómetros cúbicos al Júcar por un supuesto déficit hídrico. Además, la transferencia de este río al Vinalopó siempre se ha contemplado como una cesión que se compensaría con aguas del Ebro. Tres incógnitas La Dirección General de Medio Ambiente europea considera, además, que todavía quedan tres cuestiones del trasvase Júcar-Vinalopó sin respuesta satisfactoria: el cálculo de las superficies realmente irrigadas en la zona, el cálculo de los excedentes del Júcar y el establecimiento de un caudal ecológico para la Albufera. Es por eso que establece las condiciones de no llevar agua de otras cuencas y garantizar el caudal ecológico para aportar la financiación. A la vista de estos condicionamientos, el presidente del Gobioerno aragonés manifestó ayer que "en el anuncio que se hizo la semana pasada por parte del ministerio sobre el trasvase Júcar -Vinalopó había una gran dosis de propaganda y así lo hemos visto cuando hemos podido observar el documento definitivo". Para Marcelino Iglesias es importante que, "en el propio documento, el Gobierno de España reconoce que el sistema del Júcar es excedentario" hídricamente, algo que "es la primera vez que sucede, porque el argumento fundamental del trasvase es que tanto el Júcar como el Segura eran sistema deficitarios". Contradicciones El Ministerio español de Medio Ambiente descartó ayer que los condicionados de Barnier sean nuevos y, a pesar de lo manifestado en el texto del PHN, aseguró que "en ningún caso se ha plan. teado la posibilidad de utilizar agua procedente del Bajo Ebro para compensar las pérdidas del Júcar derivadas de su transferencia al Vinalopó". En un comunicado, Medio Ambiente mantiene que "el trasvase del Júcar al Vinalopó y el trasvase del Ebro son dos proyectos independientes que nada tienen que ver entre ellos, como ha comprobado la Comisión Europea al decidir la concesión de fondos". Los defensores del trasvase, sin embargo, saludaron recientemente esa concesión como el primer paso para la financiación europea del trasvase del Ebro. Medio Ambiente sostiene ahora que "el agua que se transferirá al Vinalopó forma parte de los excedentes hídricos del río Júcar como consecuencia de la modernización de sus regadíos". En la última reunión de la Confederación del Júcar, el 10 de diciembre, los representantes del Ministerio de Elvira Rodríguez "recalcaron que la cuenca es deficitaria", según el presidente del Instituto Aragonés del Agua, Alfredo Cajal, que estuvo presente. Cajal asegura que en esa reunión, celebrada en Valencia, el Ministerio cifró las demandas de la cuenca en 3.624 hm3 (2.800 para agricultura, con consumo tendente a la baja; 653 para consumo urbano, en alza; y 119 industrial, también en alza). Por el contrario, limitaban los recursos a 3.100 hm3 y reconocían un descenso de los mismos en los últimos 15 años.