
	REGIONAL DEZA - TABEIROS MULTIPLE	Faro de Vigo	Pág. Lunes, 05/01/2004 Autor:

	Alertan de que los saltos de Fenosa romperán el desarrollo de la zona


	[2748 Caracteres] Cristina G./Xoel Ben / agolada Los seis saltos hidroeléctricos que Fenosa va a construir en los ríos Ulla y Arnego, que afectan a Agolada, Lalín y Vila de Cruces, en la comarca del Deza; a a Antas y Palas de Rei (Lugo) y a Santiso y Touro (A Coruña), contradicen los planes de turismo rural para el desarrollo sostenible de las zonas del interior, además de que los daños que van a provocar no son equiparables al rendimiento energético que generarán, como así concluyó la mesa redonda que se celebró ayer en el Hogar de la Tercera Edad de Agolada. La mesa se celebró bajo el lema "Salvemos o río Ulla"y contó, entre el público, con el alcalde popular Manuel Costa Casares. Este concello ya se posicionó por unanimidad en contra de estos embalses y está recogiendo firmas. En la mesa participaron Xerardo Pereiro, antropólogo de la Universidad lusa de Tras Os Montes y residente en la zona; Antonio Presas, biólogo y profesor en el Instituto Laxeiro de Lalín; Manuel Ferro, gerente del Centro Comarcal Deza; Martiño Nercellas, biólogo; y Xurxo Mouriño, biólogo de la empresa Arcea, de trabajos medioambientales, que realizó un estudio sobre el impacto de estos saltos y que se adjuntó a las alegaciones que presentaron los afectados. Los saltos se enmarcan dentro del proyecto de Fenosa de 1962 de aprovechamiento hidroeléctrico de la cuenca del Ulla, y del que sólo había ejecutado la construcción del embalse de Portodemouros. Tras una modificación aprobada por Augas de Galicia en junio de 2001, empezó la cuenta atrás para el resto de los embalses: dos saltos aguas abajo de Portodemouros, con presas de 23 metros de altura, que afectan a Cruces, Touro y Arzúa; el de Sejo-Bemil, con un salto bruto de 47 metros, que afecta a Agolada y Santiso; el de Frádegas, con un salto bruto de 94 metros, que afecta a Agolada, Palas y Antas; y Lamas I y Lamas II, en el Arnego, con 50 y 43 metros,, que afectan a Agolada y Lalín. En la actualidad, los proyectos están en fase de declaración pública, previa a la expropiación de los terrenos, de ahí la reacción de los afectados que están realizando actividades diversas para que se dé marcha atrás a estos proyectos que rompen el patrimonio cultural y ecológico de esta cuenca. Xerardo Pereiro aseguró que más que minicentrales, son maxicentrales, por sus metros de altura, al tiempo que criticó el poco rigor con el que la administración realizó los estudios de impacto ambiental que no recogen muchos de los molinos y mámoas, así como el castelo de Pambre, de una zona que ya el Camino Francés recomienda por su valor paisajístico. Pereira recordó que estos proyectos ya echaron abajo otros de desarrollo de la zona como el de un balneario que se quería levantar en la zona de Frádegas.

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