REGIONAL CASTILLA-LAMANCHA AGT Recepción: 19:51	Europa Press	Pág.   Viernes, 02/05/2003 Autor:
	CASTILLA LA MANCHA .- El alcalde de Daimiel (Ciudad Real) exige medidas para controlar la proliferación de pozos ilegales
	[2307 Caracteres] El alcalde de Daimiel (Ciudad Real), José Manuel Díaz Salazar, manifestó hoy su desacuerdo con el retraso que este año se ha producido en el inicio del trasvase desde el río Tajo al Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel. A su juicio, la derivación del agua debería haberse realizado a primeros de año, y no en el mes de febrero, con el fin de ser más eficaz. Esta queja será elevada al Ministerio de Medio Ambiente, según acordó el Pleno del Patronato. Díaz Salazar estimó que una vez concluido el trasvase, previsto para dentro de un mes, el nivel de encharcamiento estará entorno a las 900 hectáreas, es decir, la mitad de la superficie inundable del parque. Asimismo, manifestó su preocupación por el descenso que está sufriendo el Acuífero año tras año, informa el Consistorio. El alcalde entiende que una de las causas principales de ese descenso es el incremento anual de extracciones, situación que está derivando en un "descontrol importante", agravándose la situación de la zona, y en consecuencia cualquier posibilidad de recuperación del acuífero. Según dijo, la solución pasa porque el Ministerio de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Guadiana se muestren más voluntariosos a la hora de tomar las medidas oportunas para frenar la extracción ilegal de agua, abordando el problema desde la raíz. En este sentido, apuntó que "si hubiera voluntad, habría más medios y se habría aprobado ya, con el consenso de todas las partes, el Plan Especial del Alto Guadiana, un acuerdo que ya tiene un año de retraso, y que está abandonado a su suerte". El alcalde daimieleño está convencido de que los agricultores no tienen la culpa de la situación actual de explotación del Acuífero. Lo que ha pasado, según Díaz Salazar, es que los cultivos de la zona se han visto abocados a una reestructuración obligada, pasando a cultivarse aquéllos que demandan más agua. A su vez, denunció que debe ponerse orden y control "a esta apuesta suicida por parte del Estado, que ha supuesto a corto plazo un incremento importante de la renta, pero que a medio plazo supone una gran amenaza de nuestro futuro". Por último, Díaz Salazar animó a la opinión pública a que presione y reivindique las soluciones necesarias para poner fin al problema del agua.