NACIONAL Sociedad
EFE Recepción: 19:54
Agencia EFE Pág.   Viernes, 19/03/2004

Autor:
 
       
 
ONU-INFANCIA Falta de agua potable mata 2 millones niños al año, dice UNICEF 
 
     
     
 

[2421 Caracteres]
Naciones Unidas, 19 mar (EFE).- Las enfermedades por la falta de agua potable y de higiene son las responsables de la muerte de cerca de dos millones de niños al año y es la causa de graves afecciones, manifestó hoy el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
En un comunicado de prensa, la agencia de la ONU denuncia la muerte a diario de 5.000 niños -lo que representa 2 millones al año- por enfermedades como la diarrea, la cólera o el tifus.
Asimismo, insta a los gobiernos a prestar una mayor atención a la falta de agua y de higiene en lugares afectados por desastres naturales o humanos.
"Los desastres naturales como terremotos e inundaciones, así como los realizados por el hombre como los conflictos armados destruyen y contaminan los suministros de agua y ponen en grave peligro la vida de los niños", manifestó Carol Bellamy, directora ejecutiva de UNICEF.
Actualmente, según la agencia de la ONU, este tipo de enfermedades relacionadas con la salubridad del agua son una de las principales causas de mortalidad infantil, especialmente de niños menores de cinco años, junto con otras afecciones como la neumonía, la malaria y el sarampión.
El año pasado, UNICEF ofreció asistencia sanitaria de emergencia en desastres como el terremoto de Bam en Irán, así como en las últimas inundaciones en Bangladesh, en donde no sólo contribuyó en la distribución de agua potable, sino también asistió en la desinfección de conductos acuíferos.
También prestó ayuda para rehabilitar la infraestructura hidráulica a Etiopía en 2003, después de que el país padeciera una fuerte sequía, y en donde 4,2 millones de etíopes sufrieron sus efectos.
Recientemente, los habitantes de Liberia también se han beneficiado de los programas sanitarios de UNICEF tras la guerra civil de 14 años que vivió el país africano.
Bellamy señaló que la mortalidad por enfermedades diarreicas y por falta de higiene ha descendido respecto a la década de los 80, cuando morían tres millones de niños al año, pero aún así pidió a los gobiernos que sigan invirtiendo en servicios básicos.
"Se debe dar poder a las comunidades locales para que sean ellas mismas las que se hagan cargo de los suministros de agua, mientras que los gobiernos deberían seguir invirtiendo en servicios de salubridad incluso cuando los tiempos son difíciles", destacó. EFE mva/olc/hma/pam