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EFE Pág.   Miercoles, 08/10/2003

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CONGRESO AGUA Agencias agua Cataluña y Aragón exigen otras opciones al trasvase 
 
     
     
 

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Madrid, 8 oct (EFE).- Responsables de la Agencia Catalana del Agua y del Instituto Aragonés del Agua calificaron de "inviable" el trasvase del Ebro y exigieron otras soluciones "más factibles", "menos caras" y "mejores para el medio ambiente", que permitan resolver los problemas hídricos de Valencia, Murcia o Almería.
Ante el XI Congreso Mundial del Agua, el director de planificación de la Agencia Catalana del Agua, Jordí Cabot, expresó el rechazo del gobierno catalán al trasvase en los actuales términos y reconoció que la Generalitat tiene un papel "difícil" y "principal" ante esta cuestión, porque es "el único territorio cedente".
En este sentido dijo no entender por qué Cataluña tiene que ceder el agua y cargar con los costes, al tiempo que reclamó buscar otras soluciones que sean sostenibles, entre ellas el trasvase del Ródano, que además saldrá "más barata".
Afirmó que el Ebro no puede soportar la transferencia anual de 1.050 hectómetros cúbicos, si se atiende a los ciclos hídricos del río.
Consideró necesario aclarar la regulación y control de las aguas en las zonas receptoras y advirtió que tendrá consecuencias sobre la calidad del agua, que puede empeorar según los usos que se hagan arriba del Bajo Ebro.
En la misma sesión, el director del Instituto Aragonés del Agua, Alfredo Cajal, en nombre del Gobierno de Aragón, manifestó "la radical disconformidad" con el trasvase.
Afirmó que Aragón necesita el agua, ya que el sólo el 20 por ciento de su territorio dispone de ella, y el trasvase afecta "profundamente" a los intereses de esta comunidad.
Agregó que tendrá consecuencias negativas sobre los embalses de la cuenca del Ebro, especialmente en Mequinenza, y que es contrario al cuidado ambiental, con impactos "claros" sobre el Delta.
Sostuvo que existen incógnitas como el coste final del agua en las comunidades receptoras, así como un sobredimensionamiento de las infraestructuras del trasvase.
"Los problemas hídricos de Murcia y Almería deben resolverse pero no desde 900 kilómetros de distancia", afirmó Cajal, quien dijo que existen otras posibilidades, entre ellas políticas de ahorro, desalación o imponer precios reales.
Concluyó que "desde fuera se quiere imponer la razón de la fuerza, pero confío en que gane la fuerza de la razón".
Por parte de las comunidades receptoras intervinieron ante el Congreso Mundial el secretario autonómico de infraestructuras de la Comunidad Valenciana, Pedro Marco, y el director general del agua del gobierno murciano, Miguel Angel Ródenas, quienes pusieron de manifiesto que los problemas de déficits existentes en sus comunidades son tan grandes que sólo se pueden solucionar con aportaciones externas.
Marco apostó por un trasvase basado en la solidaridad, equidad y sostenibilidad, y afirmó que "no es una demanda caprichosa", al tiempo que mostró el compromiso de no ampliar los regadíos.
Confió en que el trasvase solucionará los problemas de agua en Valencia, una comunidad con 4,3 millones de habitantes y un 375.000 hectáreas de regadío, que cuenta en su cuenca (Júcar) con la mitad de caudal que la del Ebro a su paso por Tortosa.
Por su parte, Ródenas afirmó que la situación en la Región de Murcia es "crítica" y que sólo puede resolverse con aportaciones externas.
"Es inevitable que haya conflictos y sólo el Estado como árbitro debe actuar", afirmó el representante murciano, quien pidió comprensión para Murcia porque "hay aguas de todos y para todos".
EFE aam/fv